Sapiens Editorial - El Poder De La Presencia (Presence): Resumen Del Libro De Amy Cuddy

RESUMEN DE

EL PODER DE LA PRESENCIA

DE AMY CUDDY

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El lenguaje corporal revela mucho sobre las personas, pero ¿se puede modificar para cambiar las percepciones que la gente tiene sobre el individuo y, finalmente, alterar la personalidad? La psicóloga social estadounidense, Amy Cuddy, se aproxima a esta pregunta mediante el estudio del poder del comportamiento no verbal. Cuddy es una apasionada de su investigación y ofrece consejos útiles para ayudar a las personas a cambiar sus vidas de una manera significativa, un cambio centrado en el lenguaje corporal adecuado y una postura poderosa.

Amy Joy Casselberry Cuddy (1972) es también autora y conferencista, conocida por sus investigaciones sobre temas sociales y psicológicos. Su investigación sobre "pose de poder" se hizo famosa rápidamente después de la charla que dio al respecto en el TED del 2012. Cuddy ha estudiado los orígenes y los resultados de cómo las personas juzgan e influyen entre sí. Ha realizado investigaciones experimentales donde ha correlacionado temas como estereotipos y discriminación, así como las causas y las consecuencias de que las personas podamos presentar emociones ambivalentes. De igual manera, ha estudiado el comportamiento y la comunicación no verbales, y las respuestas hormonales a estímulos sociales.

Cuddy obtuvo la licenciatura en Psicología Social de la Universidad de Colorado. Tiene también la maestría y el doctorado en Psicología Social de la Universidad de Princeton. Ha sido profesora asistente en la Kellogg School of Management de la Northwestern University, donde enseñó liderazgo en organizaciones en el programa de MBA y métodos de investigación en el programa de doctorado. Fue profesora asistente de Psicología en la Universidad de Rutgers, donde enseñó Psicología social de pregrado. Finalmente, fue profesora asociada de Administración de Empresas en Harvard Business School, en la Unidad de Negociación, Organizaciones y Mercados. En diciembre 2015 publicó su libro “Presencia: Llevar a su ser más audaz a sus mayores desafíos”.

“ Si se revela el poder, entonces solo podremos conocer a los verdaderamente poderosos, porque son lo suficientemente valientes como para mostrar quiénes son sin subterfugios y sin disculpas. Tienen el coraje y la confianza para abrirse a la mirada de los demás. De esa manera, el camino al poder personal es también el camino hacia la presencia. Es la forma en que nosotros, y otros, descubrimos y liberamos a quienes realmente somos.”

- Amy Cuddy

La presencia surge cuando nos sentimos personalmente poderosos, y ello nos permite estar profundamente sintonizados con nuestro más sincero y auténtico ser. Cuando encontramos este estado psicológico, podemos mantener la presencia incluso en situaciones estresantes que normalmente nos harían sentir distraídos o impotentes. Cuando alineamos nuestra forma de hablar, nuestras expresiones faciales, nuestras posturas y nuestros movimientos, nos mostramos a los demás de manera convincente. No solo eso; lo mejor de todo es que nos lo mostramos a nosotros mismos, porque el resultado será que estamos siendo auténticos.

Pero, ¿qué es exactamente la presencia? Como puede inferirse del párrafo anterior, la presencia es el estado de estar en sintonía para poder expresar cómodamente nuestros verdaderos pensamientos, sentimientos, valores y potencial. Los científicos sociales han investigado durante años cómo el comportamiento no verbal influye en los juicios de las personas; los individuos llegan a conclusiones rápidas sobre la personalidad de otros en base al lenguaje corporal de los demás. Así, si pretendemos ser poderoso, es más probable que realmente nos sintamos poderosos.

Como ya se dijo, el comportamiento no verbal no solo influye en las percepciones de los demás sobre la persona, sino que también influye sobre sus propios pensamientos, sentimientos, y la fisiología. Adoptar naturalmente una actitud abierta y expandir el cuerpo es un comportamiento inherente a todos los seres humanos al expresar orgullo después de una victoria. En un mono, por ejemplo, tras pocos días de haber asumido un rol alfa, aumentan los niveles de testosterona, la hormona de la dominancia, y disminuyen los niveles de cortisol, la hormona del estrés.

De manera similar, cuando una persona asume una postura poderosa, como permanecer de pie con las manos en las caderas, los niveles de testosterona aumentan alrededor de un 20% en dos minutos, y los niveles de cortisol disminuyen en un 25%. Por el contrario, asumir una postura de bajo poder, como sentarse con los hombros encorvados, reduce la testosterona en un 10% y aumenta el cortisol en un 15%.

La teoría de la autoafirmación consiste en identificar nuestros valores y vivir con la mayor fidelidad posible a ellos. Eso nos dará mayor presencia y nos volverá más poderosos. Se trata de recordarnos a nosotros mismos qué es lo que más nos importa y quiénes somos. Es una manera de cimentarnos en la verdad de nuestra historia personal. En consecuencia, nos sentiremos menos dependientes de la aprobación de los demás y, en caso de obtener la desaprobación de alguien, nos sentiremos más cómodos con ello.

Los psicólogos sociales crearon una prueba para medir la respuesta individual ante el estrés. Se llama Prueba de esfuerzo social de Trier (TSST por sus siglas en inglés). Los investigadores descubrieron que cuando la gente se encuentra en situaciones estresantes, la primera respuesta natural del cuerpo es producir los picos de cortisol. Sin embargo, cuando las personas piensan en valores de importancia para ellos, pueden superar la situación estresante y bajar notoriamente los niveles de cortisol.

Para lograr sentirnos más poderosos y tener una dominación sobre el estrés, primer debemos plantearnos esta pregunta: ¿Cuáles son mis valores centrales? Un atajo a la pregunta es pensar en tres palabras que mejor nos describan. Pensémoslas por un momento y después escribámoslo. Enseguida debemos responder a una segunda pregunta: ¿Cuál de las 3 palabras que escribí es más importante para definir quién soy? Ahora, escribamos por qué es importante para nosotros. Adjuntemos un ejemplo acerca de algún momento específico de nuestra vida en el que realmente nos comportamos de una manera que encarna este valor en particular.

Mucho de lo que decidimos hacer, o no hacer, depende de cómo nos sentimos. Si nos sentimos poderosos, nos empujamos nosotros mismos para enfrentar los grandes desafíos. Por el contrario, cuando nos sentimos impotentes, nos alejamos de los grandes desafíos, y quizá de nuevas oportunidades.

Para generar una mentalidad poderosa, es de vital importancia recordar todas las veces del pasado en que nos hemos sentido y en que hemos actuado de una manera poderosa. La mayoría de las personas tendemos a hacer lo opuesto: nos preparamos para la falta de poder recordándonos todas las veces que nos desempeñamos en posiciones de poco poder. Esto es incluso predisponernos a fallar.

En base a lo anterior, podemos prepararnos rápidamente para ser más o menos poderosos y luego actuar de manera más o menos poderosa. Tomémonos ahora mismo unos minutos para recordar una experiencia de poder personal. Recordemos lo bien que se sintió. Redactemos un momento en que nos hayamos sentido totalmente en control, audaces y sinceros, con la sensación de que nuestras acciones serían efectivas. Listo, gracias a este pequeño ejercicio, nuestro estado psicológico ha sido infundido con sentimientos de confianza y fortaleza.

Los resultados del ejercicio anterior se conocen científicamente como el fenómeno del “priming”. El priming es un procesamiento psicológico que sirve para detectar la influencia de un estímulo previo sobre la respuesta a un estímulo posterior. Tiene que ver con la memoria implícita. Los científicos sociales describen varios tipos de priming: