IGNACIO E. FERREIRA - EN LA MIRADA DE DIOS

EN LA MIRADA

DE DIOS

––––––––

En Busca de Dios

Copyright © 2022 En la Mirada de Dios - Ignacio E. Ferreira

La información contenida en este libro se basa en la investigación y las experiencias personales y profesionales del autor. El autor no apoya el uso de ningún protocolo en particular, pero cree que la información contenida en este libro debe estar disponible para el público. El autor no es responsable de ningún efecto negativo o consecuencia que surja del uso de las sugerencias discutidas en este libro. Todos los derechos reservados. Ninguna parte de este libro puede ser reproducida, almacenada en un sistema de recuperación o transmitida por cualquier medio, electrónico, mecánico, fotocopiado, grabación o de otra manera, sin el permiso por escrito del autor.

INTRODUCCIÓN

¿QUÉ ES BUSCAR A DIOS?

"Y el Señor Dios llamó al hombre y le dijo: ¿Dónde estás?"Gn 3.9

––––––––

¿D ónde estás? Pregúntale a Dios en el Edén (Gen 3:9). Él sabía que el hombre ya había pecado y todavía sabía dónde estaba Adán, pero en medio de todo esto él hace esta pregunta para introducir un diálogo con el hombre que Él había creado. Si Dios sabía que el hombre podía pecar, ¿por qué lo permitió? ¡¿Por qué permitió que la serpiente se acercara a Eva mientras ella era simple e inocente?! ¡¿Por qué permitió que Eva se acercara y hablara con la serpiente?! Algunos pueden pensar que estas preguntas son pecado y que no podemos hacerlas. Pero la Biblia debe ser leída y analizada hasta que se alcance un entendimiento más correcto, para que podamos conocer mejor a Dios. Es la voluntad de Dios que lo conozcamos y que estemos más cerca de Él. Dios ha dicho a través de las Escrituras que debemos buscarlo y que Él está dispuesto a ayudarnos y que nunca se esconderá de nosotros, y que se dejará encontrar.

Las razones por las que Dios ha permitido el pecado en el mundo, aún no podemos entenderlo completamente, pero podemos, entender la obra de Dios cuando estamos dispuestos a servirle con un corazón de integridad y pureza. Las razones de Dios Él las conoce y es suficiente para que confiemos en Él sin restricciones, no ciegamente más sin límite. No ciegamente porque buscamos en la palabra de Dios la comprensión de las cosas de Dios y buscamos respuestas; y Dios da. Así que nuestros ojos no están cerrados, pero podemos ver las cosas de Dios y entender totalmente de acuerdo con su voluntad. No importa por qué esto o aquello, pero importa por qué. Él tiene una causa para tener éxito en todo esto y, en esta causa, estamos tú y yo. Necesitamos conocer a Dios y entender sus obras y Dios tiene una manera de enseñarnos y, además, sus acciones son indiscutibles. Dios tiene cosas maravillosas que revelar y hacernos entender, y muchos han perdido las revelaciones de Dios a una conciencia corrupta y malévola. Son los resultados de alejarse de Dios los que producen estos efectos en la mente humana. El resultado del pecado es alejarse de Dios, pero tiene una manera de recuperar la dulce presencia del Señor y su revelación. Es a través de una búsqueda, una estrecha comunión con Él, una sumisión a Él. La Biblia dice en Apocalipsis que cuando el ángel del Señor toca la séptima trompeta, el secreto de Dios será revelado. Claramente podemos ver en este texto la fidelidad y el amor de Dios a los hombres. Dios no tiene la obligación de decirnos nada, pero Él lo hará. Él es nuestro creador y Señor, que ve y controla todo y también a todo esto, permanece fiel a sus criaturas. Su fidelidad está escrita en los anales de la historia. Y estoy seguro de que usted mismo ya ha demostrado su fidelidad. La Biblia dice:

"Pruebe y vea cuán bueno es el Señor" Salmo 34.8.

De acuerdo con este versículo, podemos tratar de ver Su bondad. No hay una persona en el mundo que aún no haya visto y participado en la bondad de Dios. Sí, muchas personas no reconocen y no quieren saber acerca de Dios y tampoco pagas por su bondad a través de la alabanza sincera y la gratitud. Es imposible respirar sin la ayuda de Dios, imposible oír, ver, amar, etc. Dios está en todas partes, y todo se organiza y sostiene con su sabiduría y omnipotencia. Él no tiene lugar donde Dios no esté allí. En el cielo está en la tierra en todas partes y debajo de la tierra. En el universo es y llama a sus estrellas por su nombre. Finalmente, Dios es todo y para todos y todo existe para su gloria. Reconocer esto no es un favor que le hagamos a Dios porque Dios no necesita nuestro favor, pero sí, es una obligación de todos los hombres en reconocimiento de la majestad de Dios. Parece ser grande decir que Dios no nos necesita, pero en verdad no lo es. Somos que necesitamos a Dios y debemos reconocer esto y ser sumisos a Él. Algunos piensan que le están haciendo un favor a Dios cuando alaba al Señor, cuando canta u ora, o incluso gana un alma para su reino. Pero está cometiendo grandes errores porque el único que gana con todo esto somos nosotros mismos. El Señor está sentado en su reino de gloria y sus ángeles le sirven noche y día, y tampoco necesita nada de nosotros. Pero, Dios nos ama y se dedica a nosotros y nos respeta hasta el punto de enviar a uno de sus ángeles para que nos ayude en tiempos de gran dificultad. Dios dijo en Amós 3.7

"Porque el Señor, el Señor, no hace nada, sin revelar su secreto a sus siervos, los profetas".

––––––––

E ste es el amor de Dios. Siendo sus criaturas y viviendo bajo su adicción, todavía hace todo esto para ayudarnos. Gloria a Dios porque Él es digno. Cuando hacemos algo por su reino, estamos haciendo por nosotros mismos y esta expresión "por su reino" es solo una expresión. De hecho, el reino de Dios busca ganar un alma más, pero si no la busco, Dios envía a otra persona para alcanzarla. ¿Entiende? Es hora de reconocer su gracia y someternos a Dios para que podamos ser encontrados aprobados por Dios y recibir su recompensa. ¿Ya has pensado cuándo estaremos en el cielo y allí conoceremos a una persona u otra que habíamos ganado en la tierra? Cuánta alegría será, cuánta alegría cuando el Señor nos recompense por nuestra búsqueda cuando estábamos en dificultades en la tierra aún sin entender las cosas, pero fieles al Señor buscando noche y dia su presencia y sus respuestas. Y entonces el Señor nos hace saber todo y nos da la recompensa; ¡cuánta alegría será! Es hora de despertar espiritualmente y hacer algo en el reino de Dios porque el tiempo es hoy, ahora y ahora.

PARTE I

LOS HOMBRES HAN BUSCADO A DIOS

––––––––