Hebert Alberto Betancourt Rodriguez - La Gallina Fashion y otras historias

La Gallina Fashion
y otras historias

La Gallina Fashion
y otras historias

HEBERT ALBERTO BETANCOURT RODRIGUEZ

La Gallina Fashion y otras historias

HEBERT ALBERTO BETANCOURT RODRIGUEZ

Esta obra ha sido publicada por su autor a través del servicio de autopublicación de EDITORIAL PLANETA, S.A.U. para su distribución y puesta a disposición del público bajo la marca editorial Universo de Letras por lo que el autor asume toda la responsabilidad por los contenidos incluidos en la misma.

No se permite la reproducción total o parcial de este libro, ni su incorporación a un sistema informático, ni su transmisión en cualquier forma o por cualquier medio, sea éste electrónico, mecánico, por fotocopia, por grabación u otros métodos, sin el permiso previo y por escrito del autor. La infracción de los derechos mencionados puede ser constitutiva de delito contra la propiedad intelectual (Art. 270 y siguientes del Código Penal).

© del texto:

HEBERT ALBERTO BETANCOURT RODRIGUEZ, 2019
hebert11betancourt@gmail.com

© de las ilustraciones:

Leidy Johana Sanchez Ordoñez
Gabriel Cacua

© diseño gráfico:

Carlos F. Caro

Diseño de la cubierta: Equipo de diseño de Universo de Letras
Imagen de cubierta: ©Shutterstock.com

www.

Primera edición: 2019

ISBN: 9788417926151
ISBN eBook: 9788417927134

A mi Dios, Jesucristo el Todopoderoso, que me ha permitido llegar hasta aquí con su inmensa providencia. A mis padres y mi hermana que me han entregado todo su apoyo y voluntad para que sea una buena persona y alcance muchos logros. A mi esposa y mi hijo por todo su amor y compañía. A ellos dedico esta obra con mucho cariño y agradecimiento..

Hebert. A. Betancourt. Rodríguez

Cuando somos honrados,
todo en la vida es más fácil;
pero a los malvados
su propia maldad los destruye.

Cada uno recibe lo que merecen
sus palabras y sus hechos.

Sabio Salomón

Presentación

Toda obra literaria es, como imaginación y como escritura, rica en imágenes, en sentidos y en mensajes. En el caso específico de Hebert A. Betancourt y sus veinte minicuentos, se puede afirmar lo mismo. Con su especial talento de síntesis Hebert nos presenta a través de un rico mundo de imágenes, personificaciones e hipérboles; variedad de temas que dan sentido a la vida como la disciplina, el respeto y los sentimientos profundos de amor y de alegría en: “La Escuela del Profe Sol”, “El Ratón y Elefante”, la I que se Enamoró del Cero” y “El Gato Happy”. En ellos, como en los restantes minicuentos, Hebert Betancourt con su estilo sencillo y fresco da vida, color y movimientos a situaciones diversas en su cosmos literario.

Por ello, al acercarnos a su producción artística, observamos que su capacidad creadora, imaginativa y de síntesis, permiten cumplir en sus mininarraciones con dos virtudes que Albert Camus reclama para el escritor; la sinceridad o amor a la verdad y la resistencia a la opresión. Estos aspectos Hebert los explora en sus creaciones de carácter didáctico y ético en forma libre y verosímil; parodia la cotidianidad humana y citadina para mostrarnos el día a día de los valores.

En relación con la forma breve que utiliza para su creación artística, Hebert hace honor a la obra de Horacio Quiroga, famoso escritor uruguayo del relato literario porque presenta historias interesantes y breves que captan inmediatamente la atención del receptor. En la brevedad de sus minicuentos están el simbolismo universal de sus temas, el lirismo denso de su mundo, el juego de la imaginación y de la fantasía y la condensación de ideas.

Antón Chejov, a propósito de la brevedad decía que era hermana del talento porque el arte de escribir era el arte de acortar, estas características las captamos en Hebert.

La concreción de su creatividad literaria es una de sus motivaciones artísticas junto a las propuestas éticas de asumir y consolidar con vigor y compromiso, valores como la responsabilidad, la tolerancia a toda prueba, la justicia, la verdad y la prudencia; desde una fe y una autoestima equilibradas como aparecen en: “El Señor Reloj”, “El Ruiseñor Cojo”, “La justicia de la Escoba”, “La Nube Rosada”, “El Miedo al Agua”, “La Gallina Fashion” y “Los Cien Árboles Frutales”.

Pero antes que seguir leyendo esta esta breve presentación los invito a leer y disfrutar los veinte textos literarios de Hebert, para descubrir en ellos los mensajes, las consideraciones valiosas y las críticas sanas en torno a la conducta humana.

El logro estético, ético y didáctico de estos minicuentos se sustenta en las moralejas, en el manejo acertado de las imágenes y del lenguaje en el cual las metáforas, las personificaciones, las enumeraciones y los epítetos encarnan la capacidad creadora de Hebert A. Betancourt para quien el “El deseo de ser feliz vence cualquier tristeza, por grande que sea”, elemento valioso de su fuerza interior. A través de formas lingüístico-literarias, representa su responsabilidad expresada en su subjetividad y en la preocupación por los otros y por su mundo; en esa medida su obra porta una función socio-cultural.

FLOR DELIA PULIDO C.
Magíster en Literatura.

La Gallina Fashion

Hace algún tiempo existió en una tierra Desconocida, una Gallina llamada Fashion. Muy distinguida por todos los animales de la época, quizá por su fama, su estilo, su moda y su hermosura. Toda una personalidad.

Prudencia…

La Gallina Fashion vivía muy orgullosa de su aspecto físico, pues era casi perfecta. Ante todo, sus amos le apreciaban mucho, le habían tenido cuidado especial desde que era un huevo nada más. Su alimentación era siempre la más apropiada y suficiente para un animal como ella: tal vez maíz, trigo, gusanos e insectos Light, etc. Todo ese alimento nunca lo obtuvo por sus propios medios, sino de la mano de sus dueños. Por lo tanto, ella no tenía de qué preocuparse.

Uno de los oficios de La Gallina Fashion era jugar con los pollitos de sus amigas. Coquetear con los más apuestos gallos. Conversar con el gato sobre sus correrías por las noches y con el perro acerca de sus aventuras por el vecindario. Tenía dados de maíz, un ajedrez fabricado de saltamontes y otros entretenimientos más.

A la Gallinashion, como algunos la llamaban, no le alcanzaba el tiempo. Los centros comerciales y las pasarelas de plumas la ocupaban a diario. Le dedicaba todo su empeño a la empresa de cosméticos de corral: cosméticos para crestas rojas, picos amarillos y patas Orange. Bueno, en realidad, Gallinashion era el nombre de su empresa de cosméticos.

Nadie le ganaba en la pasarela, pues era muy amiga de los jurados: El Gallo Claudio, la Gallina Josefina y El Gato Tom.

La Gallina Fashion pensaba sólo en su fama y en su apariencia: en perfumes, joyas y muchos atuendos. Se mostraba egoísta y superficial. Hablaba lo que no debía, hacía ruido en los momentos menos indicados y se presentaba en lugares no apropiados para gallinas.

Siempre permanecía conectada a las redes sociales en su celular de última generación. Las cirugías estéticas eran también su pasión. Por el quirófano pasaron su cresta, sus alas, su pico y hasta su grande rabadilla.