Meditaciones
para sanar tu vida
Título original: Meditations to Heal Your Life
Editor original: Hay House, Inc., Carson (California)
Traducción: Equipo editorial
Reservados todos los derechos. Queda rigurosamente prohibida, sin la autorización escrita de los titulares del Copyright, bajo las sanciones establecidas en las leyes, la reproducción parcial o total de esta obra por cualquier medio o procedimiento, incluidos la reprogragía y el tratamiento informático, así como la distribución de ejemplares mediante alquiler o préstamo públicos.
©1994 by Louise L. Hay
©1995 by Hay House, Inc., Carlsbad. CA
ISBN 13:978-1-56170-586-3
ISBN 10: 1-56170-586-1
Printed in USA
Impresión 1: Abril 1994
Impresión 7: Febrero 2007
Este libro propone ideas destinadas a estimular la creatividad de nuestro pensamiento. Nos ofrece una oportunidad para ver otras maneras de abordar nuestras experiencias. Llegamos a este mundo con una mente pura y limpia, totalmente conectada con nuestra sabiduría interior. A medida que crecemos, vamos recogiendo los miedos y las limitaciones de las personas adultas que nos rodean. Cuando llegamos a la edad adulta, ya tenemos muchas creencias negativas de las que ni siquiera somos conscientes. Y solemos construir nuestra vida y nuestras experiencias sobre estas falsas creencias.
En este libro tal vez encuentres afirmaciones con las que no estás de acuerdo, porque es posible que estén en contradicción con tus creencias. No pasa nada. Es lo que yo llamo «remover la olla». No tienes por qué estar de acuerdo con todo lo que yo digo. Pero, por favor, analiza lo que crees y por qué lo crees. Así es como crecemos y cambiamos.
Cuando emprendí mi camino solía poner en duda muchos de los conceptos metafísicos que oía. Cuanto más examinaba mis creencias en relación con las nuevas ideas, más iba comprendiendo que muchas de las cosas que creía estaban contribuyendo a la infelicidad de mi vida. Cuando comencé a aflojar y soltar los conceptos viejos y negativos, mi vida también cambió para mejor.
Empieza por cualquier parte de este libro. Ábrelo por donde quieras. El mensaje será el que tú necesitas en ese momento. Puede confirmar lo que ya crees, o puede cuestionar tus ideas. Todo esto forma parte del proceso de crecimiento. Estás a salvo y todo está bien.
Vivo en un mundo de amor
y aceptación.
Irradio aceptación
S i deseo que me acepten tal como soy, entonces necesito estar dispuesta a aceptar a los demás tal como son. Siempre deseamos que nuestros padres nos acepten totalmente, y sin embargo muchas veces no estamos dispuestos a aceptarlos a ellos tal como son. La aceptación es darnos a nosotros mismos y a los demás la capacidad de ser, sencillamente. Nos comportamos con arrogancia cuando establecemos normas para los demás. Sólo podemos establecer normas para nosotros mismos. E incluso entonces, nos conviene que sean directrices en lugar de normas. Cuanto más nos ejercitamos en aceptarnos a nosotros mismos, más fácil nos resulta abandonar los hábitos que ya no nos sirven. Es fácil crecer y cambiar en un ambiente de aceptación.
Me siento a gusto
con lo que hago.
Avanzo por la vida
con facilidad y sin esfuerzo
V ivo todo tipo de experiencias con una actitud abierta a los afortunados hallazgos. Hay infinitas maneras de hacer las cosas. Si hemos hecho mucho trabajo, nos alegramos. Si hemos hecho poco, nos alegramos. Si no hemos hecho nada, también nos alegramos. Hagamos lo que hagamos, es lo perfecto en ese momento. En realidad no hay nada que «tengamos que hacer». Hay cosas que sería mejor hacer, pero siempre podemos elegir. La vida es una aventura y el Universo está de nuestra parte.
Recupero mi poder y supero
todas las limitaciones.
Me perdono y me libero
U na fuerte dependencia de cualquier cosa exterior a mí es adicción. Podemos ser adictos a las drogas, a los fármacos, al alcohol, al sexo y al tabaco; también puedo tener adicción a culpar o juzgar a los demás, adicción a la enfermedad, a las deudas, a ser víctima, a ser rechazado. No obstante, puedo superar estas adicciones. Ser adicto es ceder mi poder a una substancia o un hábito. Siempre puedo recuperar mi poder. ¡Este es el momento en que recupero mi poder! Elijo adquirir el hábito de saber que la vida está aquí, para mí. Estoy dispuesta a perdonarme y seguir adelante. Tengo un espíritu eterno que siempre ha estado conmigo, y que está presente en este momento. Me relajo, me libero, me acuerdo de respirar y voy dejando marchar los viejos hábitos mientras practico los nuevos.
La vida me ama
y estoy a salvo.
Me comunico libremente
E stoy a salvo mientras crezco. Me gusta aprender, crecer y cambiar; me siento seguro en medio del cambio porque sé que forma parte natural de la vida. Mi personalidad es flexible y por eso me resulta fácil avanzar con la corriente de la vida. Mi ser interior es coherente, por lo tanto estoy a salvo en cualquier tipo de experiencia. Cuando era pequeño no sabía lo que me traería el futuro. Ahora que comienzo mi viaje hacia la edad adulta, comprendo que el mañana es igualmente desconocido y misterioso. Elijo creer que estoy a salvo mientras crezco y me voy responsabilizando de mi vida. Mi primer acto adulto es aprender a amarme incondicionalmente, porque así puedo afrontar lo que sea que me traiga el futuro.
Uso mis afirmaciones
juiciosamente.
En el principio era el Verbo
C ada pensamiento que tengo y cada frase que digo es una afirmación, positiva o negativa. Las afirmaciones positivas crean experiencias positivas, y las afirmaciones negativas crean experiencias negativas. Si se planta una semilla de tomate, sólo se convertirá en una tomatera; una bellota de roble sólo se convertirá en un roble. Un cachorro de perro sólo se convertirá en un perro. Si repetimos continuamente afirmaciones negativas sobre nosotros mismos y la vida, sólo vamos a producir más experiencias negativas. Ahora me elevo por encima de la costumbre de mi familia de ver la vida de manera negativa. Mi nuevo hábito de hacer afirmaciones consiste en hablar solamente de lo bueno que deseo en mi vida. Sólo así vendrá a mí lo bueno.
Los alimentos son buenos
amigos. Les agradezco que me
den su vida para nutrirme.
Me gusta comer buenos alimentos
C omer alimentos buenos y nutritivos es muy agradable, ya sea en casa, en un restaurante, en el campo, o al salir de la oficina. Me amo y por lo tanto elijo ser consciente de lo que me llevo a la boca y de cómo me sienta. Cuando como, pongo combustible en mi cuerpo para que me dé energía. Cada cuerpo es diferente. No puedo decirte lo que debes comer porque no conozco tu cuerpo. Busca el tipo de combustible que necesita para tener una salud y una energía óptimas. Las comidas rápidas son divertidas de vez en cuando, pero algunas personas consideran normal vivir de refrescos, pasteles y platos preparados, que contienen muy pocos elementos nutritivos. Aprender los fundamentos de la buena nutrición es divertido y da energía. Disfruto cocinando y comiendo platos deliciosos, sanos y naturales.
Disfruto del amor
que tengo para compartir.
Soy un ser resplandeciente de amor
E n lo más profundo de mi ser hay una infinita e inagotable provisión de amor. Jamás podrá agotarlo en esta vida, de modo que no tengo ninguna necesidad de ahorrarlo. Siempre puedo ser generosa con mi amor. El amor es contagioso. Cuando doy amor, vuelve a mí multiplicado. Cuanto más amor doy, más tengo. He venido a este mundo a dar amor. Llegué llena de amor, y aunque dé amor toda mi vida, cuando deje esta tierra continuaré teniendo un corazón lleno y feliz. Si deseo más amor, sólo tengo que dar más amor. El amor es, y yo soy.
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