• Quejarse

Gérard Chauveau - Le cuesta aprender a leer. ¿Cómo ayudarlo?

Aquí puedes leer online Gérard Chauveau - Le cuesta aprender a leer. ¿Cómo ayudarlo? texto completo del libro (historia completa) en español de forma gratuita. Descargue pdf y epub, obtenga significado, portada y reseñas sobre este libro electrónico. Año: 2017, Editor: De Vecchi Ediciones, Género: Ordenador. Descripción de la obra, (prefacio), así como las revisiones están disponibles. La mejor biblioteca de literatura LitFox.es creado para los amantes de la buena lectura y ofrece una amplia selección de géneros:

Novela romántica Ciencia ficción Aventura Detective Ciencia Historia Hogar y familia Prosa Arte Política Ordenador No ficción Religión Negocios Niños

Elija una categoría favorita y encuentre realmente lee libros que valgan la pena. Disfrute de la inmersión en el mundo de la imaginación, sienta las emociones de los personajes o aprenda algo nuevo para usted, haga un descubrimiento fascinante.

Gérard Chauveau Le cuesta aprender a leer. ¿Cómo ayudarlo?

Le cuesta aprender a leer. ¿Cómo ayudarlo?: resumen, descripción y anotación

Ofrecemos leer una anotación, descripción, resumen o prefacio (depende de lo que el autor del libro "Le cuesta aprender a leer. ¿Cómo ayudarlo?" escribió él mismo). Si no ha encontrado la información necesaria sobre el libro — escribe en los comentarios, intentaremos encontrarlo.

La lectura es un aprendizaje complejo, que supone problemas para algunos niños. La comprensión de los mecanismos de este aprendizaje proporciona a los padres los medios para ayudarlos: con pequeños juegos, apoyo psicológico y, sobre todo, sin ninguna presión ni drama, el niño pronto llegará al nivel de sus compañeros de clase. - ¿Qué significa saber leer? - ¿Cuándo hay que empezar a preocuparse? - ¿Cómo identificar la naturaleza del problema? - ¿Y si es disléxico? - ¿Es cuestión del método utilizado? - ¿Qué papel tienen los padres? - ¿Debe repetir curso?...

Gérard Chauveau: otros libros del autor


¿Quién escribió Le cuesta aprender a leer. ¿Cómo ayudarlo?? Averigüe el apellido, el nombre del autor del libro y una lista de todas las obras del autor por series.

Le cuesta aprender a leer. ¿Cómo ayudarlo? — leer online gratis el libro completo

A continuación se muestra el texto del libro, dividido por páginas. Sistema guardar el lugar de la última página leída, le permite leer cómodamente el libro" Le cuesta aprender a leer. ¿Cómo ayudarlo? " online de forma gratuita, sin tener que buscar de nuevo cada vez donde lo dejaste. Poner un marcador, y puede ir a la página donde terminó de leer en cualquier momento.

Luz

Tamaño de fuente:

Restablecer

Intervalo:

Marcador:

Hacer

Gérard Chauveau

Carine Mayo

LE CUESTA

APRENDER A LEER

¿Cómo ayudarlo?

EDITORIAL DE VECCHI

A pesar de haber puesto el máximo cuidado en la redacción de esta obra, el autor o el editor no pueden en modo alguno responsabilizarse por las informaciones (fórmulas, recetas, técnicas, etc.) vertidas en el texto. Se aconseja, en el caso de problemas específicos —a menudo únicos— de cada lector en particular, que se consulte con una persona cualificada para obtener las informaciones más completas, más exactas y lo más actualizadas posible. EDITORIAL DE VECCHI, S. A. U.

Colección dirigida por Bernadette Costa-Prades.

Hay que leer, hay que leer… ¿Y si, en lugar de exigir que se lea, el profesor decidiera compartir su propia felicidad de leer?

Daniel Penca, Como una novela.

Diseño gráfico de la cubierta de Bruno Douin.

Ilustración de Jesús Gracia Sánchez.

Traducción de Ariadna Martín Sirarols.

Título original: Il a du mal à apprendre à lire.

© Éditions Albin Michel, S. A. - París 2004

© Editorial De Vecchi, S. A. 2017

© [2017] Confidential Concepts International Ltd., Ireland

Subsidiary company of Confidential Concepts Inc, USA

ISBN: 978-1-68325-535-2

El Código Penal vigente dispone: «Será castigado con la pena de prisión de seis meses a dos años o de multa de seis a veinticuatro meses quien, con ánimo de lucro y en perjuicio de tercero, reproduzca, plagie, distribuya o comunique públicamente, en todo o en parte, una obra literaria, artística o científica, o su transformación, interpretación o ejecución artística fijada en cualquier tipo de soporte o comunicada a través de cualquier medio, sin la autorización de los titulares de los correspondientes derechos de propiedad intelectual o de sus cesionarios. La misma pena se impondrá a quien intencionadamente importe, exporte o almacene ejemplares de dichas obras o producciones o ejecuciones sin la referida autorización». (Artículo 270)

Índice

Introducción
■   Cuándo tenemos que preocuparnos

Pronto será Navidad. Una parte de la clase ya empieza a leer, mientras que nuestro hijo apenas reconoce las palabras. Surge la duda: ¿y si fracasa?, ¿por qué ese desfase entre él y los demás?

Ante todo, es preciso considerar la edad del niño. Y es que, entre un niño que cumplirá seis años a finales de diciembre y su compañero que los tiene desde enero, hay un año de diferencia y, a esa edad, eso cuenta mucho. Es natural que el pequeño tenga más dificultades que los mayores. También es un error pensar que los niños que están en primaria no saben nada de lectura y que empiezan de cero. «Entras en la escuela, qué bien, vas a aprender a leer», les dicen a menudo. Eso significa olvidar que tienen contacto con lo escrito desde hace tiempo y que en el parvulario ya han llevado a cabo actividades de lectura y escritura. Al empezar la primaria, algunos ya han entendido qué significa leer y lo que tienen que hacer para leer, lo que explica que se adelanten a los demás y se adapten pronto a su nueva escuela. Estos ya han aprendido a leer mientras que muchos otros apenas empiezan. ¿Se van a agravar o a terminar estas diferencias? ¿Está penalizado el niño que tenga un mal comienzo? Lo mejor es preguntárselo al maestro.

■   Hablar con la maestra

Los maestros pueden distinguir a menudo la diferencia entre dificultades temporales y dificultades más profundas. Aunque en primaria un alumno puede confundir una palabra con otra y también algunas letras, eso no debe alarmarnos en absoluto. En cambio, si le cuesta ponerse a trabajar, seguir lo que se dice en clase, si se queja porque no quiere ir a la escuela, sin duda algo no funciona. Hablando con la maestra sabrá si la preocupación está fundamentada o no y podrán determinar juntos los pasos que deben seguirse.

■   Aprender en dos años, ¿una realidad?

Antes de empezar la enseñanza obligatoria en primaria, existen los tres años de parvulario en los que se inicia la preparación para leer: ejercicios y juegos sirven para que poco a poco los niños aprendan las letras, a escribir su nombre y la fecha, primero en mayúsculas y después en minúsculas, a manejar el lápiz... De ese modo, cuando empiezan primaria, ya tienen un importante bagaje para iniciar el proceso de aprender a leer. Los dos primeros años de primaria, el primer ciclo, se centran específicamente en el aprendizaje de la lectura y la escritura. Al terminar este ciclo los alumnos tienen que saber leer, aunque todavía les falte mucha velocidad y capacidad de comprensión de lo que leen. Sin embargo, no debe confiarse y pensar que el tiempo lo arregla todo: cuando la diferencia entre su hijo y los demás se hace demasiado profunda, se sentirá mal y perderá confianza en sí mismo. Y cuanto mayor sea la diferencia, más difícil será recuperarla.

■   Acompáñele

Por consiguiente, es esencial efectuar un seguimiento del trabajo escolar del niño e intentar que obtenga respuesta a sus dificultades... ¡Sin perder la calma! Es inútil agobiarlo con ejercicios durante el fin de semana o durante las vacaciones. Demasiada preocupación, demasiada esperanza por parte de la familia, pueden generar un exceso de presión, insoportable para el niño. Si se siente angustiado por el miedo al fracaso y a decepcionar a sus padres, tendrá un reto por delante demasiado importante y corre el riesgo de bloquearse y tener problemas en progresar. Es necesario dosificar sutilmente el trabajo y el reposo, y mantener una actitud tranquila y benevolente: las dificultades en lectura no son insuperables.

C APÍTULO
Entender lo que no funciona

Lo más importante es conocer las dificultades de su hijo para poder ayudarlo. Pero las causas del problema no son siempre fáciles de identificar, porque pueden tener múltiples orígenes, que no se limitan al método de lectura empleado.

■   No va más

La maestra nos acaba de decir que al niño le cuesta leer. Nos pregunta un montón de cosas: «¿Está seguro de que ve bien, de que oye bien? ¿Todo va bien en casa?». Y, de repente, ya no nos sentimos seguros de nada. ¿Qué puede hacerse? En este tipo de situación, primero se manifiesta la angustia: «¿Y si mi hijo tuviera un problema médico? ¿Y si no fuera bastante inteligente? ¿Y si no soy capaz de prepararlo para el aprendizaje y aceptar la disciplina de la escuela?».

A veces esta angustia deja paso a la cólera: enfado contra el método de lectura, contra el sistema escolar que no está adaptado a los alumnos de hoy en día, contra el profesor que no entiende al niño. Estas reacciones son naturales porque, por primera vez, el alumno es juzgado y evaluado, y sus padres también se sienten juzgados y evaluados.

Sin embargo, es preciso mantener siempre el sentido común. No sirve de nada torturarse o intentar buscar culpables. Al fin y al cabo, poco importa por qué el niño ha llegado hasta ahí: por la llegada de un hermanito, el divorcio de los padres o porque nunca se ha sentido atraído por la escuela. Lo que cuenta, sobre todo, es cómo saldrá de esta. Para conseguirlo, es importante identificar sus dificultades para saber si la respuesta que debe adoptarse es de tipo médico, psicológico u otro. Sin perder de vista las dificultades, la mayor parte del tiempo estas están relacionadas con el aprendizaje de la lectura en sí, que es un proceso largo y complejo. A continuación, le presentamos algunas indicaciones para ayudarle a identificar los problemas del niño y... ¡para evitar que tenga que consultar a todos los especialistas de la tierra!

■   Problemas relacionados con la situación
◊   Un cambio radical

Cuando se inicia la escuela, el cambio que se produce en la vida del niño es muy importante: debe adaptarse a su nueva escuela, a sus nuevos compañeros, a un patio de recreo desconocido donde forma parte de los más pequeños, mientras que, en su antigua escuela, era parte de los mayores. Y además, y sobre todo, la forma de trabajar es absolutamente distinta. Ahora que está en la escuela de verdad, el niño debe quedarse más tiempo sentado en su mesa. Por primera vez, recibe una enseñanza sistemática con lecciones que aprender y ejercicios que hacer. Por primera vez, le ponen notas y se enfrenta a la noción de fracaso escolar. Y, cuando sale de la escuela por la tarde, aún no ha terminado porque todavía tiene que hacer los deberes. Algunos niños tienen la impresión de que ya no tienen tiempo de jugar, y les es muy difícil soportar esta presión. Algunos hasta lo expresan claramente: «Yo prefiero la guardería». Por otra parte, es mejor evitar un horario demasiado cargado, sobre todo por la tarde: a veces, es pesado tener que correr a clase de música o danza después de un día de escuela que exige un gran esfuerzo de atención.

Página siguiente
Luz

Tamaño de fuente:

Restablecer

Intervalo:

Marcador:

Hacer

Libros similares «Le cuesta aprender a leer. ¿Cómo ayudarlo?»

Mira libros similares a Le cuesta aprender a leer. ¿Cómo ayudarlo?. Hemos seleccionado literatura similar en nombre y significado con la esperanza de proporcionar lectores con más opciones para encontrar obras nuevas, interesantes y aún no leídas.


Reseñas sobre «Le cuesta aprender a leer. ¿Cómo ayudarlo?»

Discusión, reseñas del libro Le cuesta aprender a leer. ¿Cómo ayudarlo? y solo las opiniones de los lectores. Deja tus comentarios, escribe lo que piensas sobre la obra, su significado o los personajes principales. Especifica exactamente lo que te gustó y lo que no te gustó, y por qué crees que sí.