INTOLERANCIAS ALIMENTARIAS
Dra. Ana Bellón
INTOLERANCIAS ALIMENTARIAS
Cómo detectarlas y controlarlas
© Ana Bellón, 2019.
© de las ilustraciones: Francisco Javier Guarga Aragón, 2019.
© de esta edición: RBA Libros, S.A., 2019.
Avda. Diagonal, 189 - 08018 Barcelona.
rbalibros.com
Primera edición: septiembre de 2019.
ref.: ODBO567
isbn: 978-84-9187-510-9
depósito legal: b.13.222-2019
Coordinadora de la colección: Laura González Bosquet.
Redacción: Mercedes Castro.
dâctilos • preimpresión
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con todo mi amor para mis padres, que desde el cielo cuidarán siempre de mí y de mis hermanas.
y a mis tres jotas: Juan, Jorge y Jesús. muchas gracias por hacerme tan feliz.
CONTENIDO
Prólogo
Según pasan los años aumenta el número de personas a las que comer no les resulta un placer, bien porque tienen intolerancia a ciertos alimentos o porque son alérgicas a ellos. La causa de esta enfermedad no se conoce, aunque hay muchas teorías sobre el incremento tanto de las alergias como de las intolerancias, muchas de las cuales intentaré explicar con claridad en este libro.
Seamos sinceros: cuando uno tiene una intolerancia, la alimentación se vuelve un rollo. La intolerancia hace que no puedas comer con libertad, siguiendo tu instinto o tu gusto. Si no es tratada o detectada, no solo te causa malestar, sino que casi te obliga a realizar un máster en nutrición y, también, a tener que estar pendiente de leer todas las etiquetas nutricionales de cabo a rabo y con atención, si no quieres encontrarte con tu «enemigo» y presentar un abigarrado conjunto de síntomas que pueden fastidiarte cualquier fiesta debido a las molestias —gastrointestinales o de otra clase— que la intolerancia te causa. Y eso por no hablar de las consecuencias mucho más graves que pueden aparecer si confundes intolerancia con alergia y, debido a ello, no la tratas adecuadamente o no prestas la atención que deberías a lo que comes.
Como bien decía uno de mis profesores de la facultad, el que mejor conoce la enfermedad es el propio paciente, y precisamente por esto, cuando se tiene el diagnóstico de una intolerancia, quien mejor sabe qué le sienta bien o mal es la persona que la padece.
Pero estamos avanzando acontecimientos, en realidad, porque el principal problema en ocasiones no es tener una intolerancia alimentaria sino ser capaz de detectarla y de entender que las molestias que se padecen son fruto de ella. Esto se debe, muchas veces, a que los síntomas de una intolerancia alimentaria pueden ser tan variados y afectar a tantos órganos y sistemas distintos que, en un primer momento, cuando los sufrimos, no nos hacen pensar que su origen puede estar en el aparato digestivo.
Precisamente por esto, uno de los principales objetivos de este libro, quizá mi mayor pretensión, es el de animar a los miles y miles de pacientes que cada día sufren muchos síntomas sin saber su causa a ponerse en manos de un médico y a que se hagan las pruebas precisas para obtener un diagnóstico fiable, gracias al cual podrán tener una mayor calidad de vida. Y es que no hay nada mejor para solucionar un problema que identificarlo, y lo mismo ocurre con las intolerancias alimentarias: si sabemos qué alimentos nos sientan mal y evitamos todo aquello que nuestro organismo no puede digerir o absorber correctamente, o aprendemos, en todo caso, a calcular cuánto podemos comer sin tener molestias, ganaremos calidad de vida, nos alimentaremos y viviremos mejor, pero, sobre todo, viviremos confiados y tranquilos y, por tanto, razonablemente felices.
Este es mi objetivo. Con que pueda contribuir a que tan solo una persona sepa reconocer que lo que le puede estar ocurriendo es sinónimo de intolerancia y, en consecuencia, ayudarla a aprender a distinguir entre alergia e intolerancia, me doy por satisfecha.
Porque en la vida hay muchas cosas que nos proporcionan placer y, por supuesto, la comida, nuestra alimentación, tiene que ser una de ellas.
Lean, saboreen y disfruten.
dra. ana bellón
PRIMERA PARTE
¿Qué son las intolerancias alimentarias?
Consideraciones generales
Para que el texto resulte útil al lector interesado he considerado, como experta en la materia, que lo más práctico es organizar el libro en tres partes bien diferenciadas. La primera incluirá todos los conceptos necesarios para entender bien qué es una intolerancia alimentaria, qué la diferencia de una alergia a algún alimento, cuáles son sus síntomas, cuáles son los principales tipos de intolerancias alimentarias y cómo se clasifican, qué métodos se emplean hoy en día para detectarlas y diagnosticarlas y cómo pueden tratarse.
Después, vistos estos aspectos comunes a todas las intolerancias alimentarias, pasaremos a tratar, una por una, las intolerancias más comunes en la actualidad de manera detallada. De esta manera, habrá un capítulo dedicado a la intolerancia a la lactosa, otro dedicado a la intolerancia a la histamina, etc.
Espero que con esta estructura las personas que deseen conocer tanto las particularidades de alguna intolerancia en concreto, como las causas, el origen o el tratamiento de esta afección de un modo más genérico, puedan hallar sin problema la información que necesiten y obtener de esta obra la utilidad que desean. Porque precisamente de eso es de lo que se trata: de que este libro sea una herramienta de lectura sencilla, pero también informativa y completa.
Las reacciones adversas a los alimentos
¿Por qué nos sienta mal la comida?
Quizá como primer concepto, antes de comenzar a ver en profundidad en qué consisten, cómo y por qué se desencadenan las reacciones adversas a los alimentos o, dicho de un modo coloquial, tal y como reza el título de este epígrafe, por qué nos sienta mal la comida, sería bueno detenernos a explicar qué entendemos por alimento y por comida .
Comúnmente, los médicos especialistas en la materia entendemos por alimento aquella sustancia nutritiva que precisa un organismo o un ser vivo para mantener sus funciones vitales. Dicho de otro modo: es una sustancia ajena a nuestro organismo, que ingerimos y nos proporciona no solo nutrientes, sino también satisfacción y otras sensaciones gratificantes. En cambio, la comida sería el conjunto de estos alimentos que, cocinados o no, tomamos de manera voluntaria.
Vayamos ahora con la pregunta con la que abrimos esta introducción: ¿por qué nos sienta mal la comida?
Lo habitual es que nuestro organismo tolere los alimentos que tomamos, pero en ocasiones, tras ingerir algunos alimentos, nuestro cuerpo genera una respuesta alterada que conlleva la aparición de efectos indeseados o nocivos. Esto es lo que comúnmente se entiende por reacción adversa a los alimentos .
¿Qué es una reacción adversa a los alimentos?
Tal y como acabamos de hacer con la definición de alimento , vayamos ahora con la expresión que en medios sanitarios utilizamos para concretar qué es una reacción adversa a los alimentos : este enunciado es un término genérico que indica una relación de causa-efecto entre la ingesta o el contacto con un alimento y una respuesta anormal en el organismo.