Se dice que el preámbulo de un libro funciona como una explicación o advertencia sobre lo que vendrá. Si tengo que dar un aviso, antes de que empiecen a volar conmigo, es que todo lo que encuentren en estas páginas puede tocar fibras íntimas, revolver muy amorosamente algunas cuestiones que hasta hoy estuvieron cómodas y revolucionarles el modo en el que se ven frente a la vida (y a la comida, por supuesto).
Quienes se animen a ese tránsito maravilloso, abracen al de al lado: tendremos turbulencias de las lindas. Quienes no, los invito a mantenerse a bordo de todos modos. Cuando alcancemos la velocidad crucero, además de snacks, habrá mucha magia.
Una alimentación consciente es la base de la buena salud. Cada una de las elecciones que hacemos determina nuestro bienestar ahora y en el futuro, por eso la consulta con el nutricionista es mucho más que pesarse y llevarse a casa una hojita con la dieta. Es la posibilidad de una transformación integral para obtener calidad de vida y llegar a la mejor versión de nosotros mismos.
Matías Marchetti abre las puertas del consultorio y, a través de las historias de sus pacientes, invita a que revisemos las emociones que nos vinculan con la alimentación, a que repensemos la organización de las comidas y a que encaremos un nuevo plan a medida y a largo plazo.
Con un estilo descontracturado y empático nos plantea un abordaje revolucionario de la nutrición y ofrece las bases del método #MarchettiRules®. También incluye recetas sencillas y fáciles, para que comer deje de ser un tema en nuestra vida.
MATÍAS MARCHETTI
Nació en Buenos Aires, es licenciado en Nutrición (MN 7210), autor del libro Método #MarchettiRules®. La actitud para aprender a nutrirte y comer lo que quieras y creador de #MarchettiRules®, un método que propone repensar la alimentación empoderando a las personas para que rompan con todo lo conocido y encaren un nuevo camino basado en el aprendizaje.
Se perfeccionó en técnicas de empowerment, resiliencia y conductismo con el fin de potenciar sus conocimientos y acercarse de manera empática a sus pacientes, desde un abordaje global que incluye campos como la filosofía, la psicología y la neurociencia.
Es un convencido de que cada persona es única y necesita su propio plan de alimentación y bienestar.
© Manuel Saratella y Sebastián Romero
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Marchetti, Matías
Nutrición al diván / Matías Marchetti. - 1a ed. - Ciudad Autónoma de Buenos Aires : Grijalbo, 2022.
(Autoayuda y Superación)
Libro digital, EPUB
Archivo Digital: descarga y online
ISBN 978-950-28-1525-1
1. Nutrición. I. Título.
CDD 613.2
Diseño de tapa: Penguin Random House Grupo Editorial
Ilustraciones: Nontué Sans y Franco Obispo
Edición en formato digital: septiembre de 2022
© 2022, Penguin Random House Grupo Editorial, S. A.
Humberto I 555, Buenos Aires
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INTRODUCCIÓN
ANESTESIADOS
El vacío se puede confundir con la pura nada, y la nada nos lleva a infinitas posibilidades.
S HINICHI S UZUKI
Me fascina la palabra aisthesis. Proviene del griego y significa “sensación”, aunque una rama de la filosofía también la vincula al concepto de “estética”. Por eso, cuando le sumamos el prefijo “an” (sin), y llegamos al concepto de “anestesia”, estamos hablando de todo aquello que nos hace percibirnos sin sensaciones, incapaces de reaccionar, de sentir placer o dolor, inmutables frente a cualquier estímulo. Y, también, inhabilitados para conectarnos con nuestra belleza, la real, no la de cartón; la que nos hace distintos del resto.
Esa sensación, dicha de la forma que se quiera (porque también la disfrazamos de cansancio, hastío, fatiga, desgano), es endémica en estos tiempos. Sobre todo, entre quienes viven en grandes urbes, donde la vida posmoderna, la tecnología y la velocidad parecen haber generado tierra fértil para que el consumo crezca a sus anchas.
Vamos en fila, como lobotomizados, detrás de lo que nos hicieron creer que nos va a hacer felices, de lo que nos dicen que tenemos que comer para ser “saludables”, del éxito profesional que debemos alcanzar, de los viajes que vamos a arrepentirnos de no haber hecho, de lo geniales que debemos ser como padres, hijos o amigos y del cuerpo fit que tenemos que lucir para ponernos un traje de baño. ¿No te dan ganas, a veces, de bajarte de esta montaña rusa?
El problema, usando la analogía del viaje en avión que te propuse al comienzo, es que ya estamos a bordo de este mundo loco que nos tocó; y no podemos abrir la ventanilla y saltar al vacío, romper con todo eje cultural, quebrar la matriz con la que estamos moldeados. Lo que sí podemos hacer es individualizar nuestro contexto y crear una metodología propia para salir del sueño profundo, de la anestesia general.
Estamos en un momento de quiebre, frente a una posibilidad maravillosa. El vacío que sentimos como sociedad caló tan profundo que la gran mayoría de las personas quieren despertarse y despeinar al sistema de una vez por todas; para eso debemos hacernos responsables, dejar de lado la queja, la victimización y la culpa, dando lugar a la acción. La realidad es neutra, todo el resto es el cuento que cada cual elige contar.
Ajustemos la lupa con la que nos miramos y aprovechemos el libre acceso al conocimiento que nos ofrece esta era, en donde cualquier disciplina que queramos aprender está al alcance de nuestras manos. El talento, la creatividad y el desarrollo personal le propusieron un reto al mercado, para que el mayor capital sea el saber y no el tener. Juguemos para esa liga y hagamos un incendio de esta chispa, no vaya a ser que sea fugaz.
C UANDO PASE EL TEMBLOR
No faltan (de hecho, son muchos) quienes después de escuchar estas ideas me sueltan una contrapartida: “Todo muy lindo, Mati. Pero mi tema no es el mundo, es la heladera”. Y ahí es cuando empieza el trabajo de verdad. Cuando palabra a palabra, comida a comida, empezamos a descubrir que la alimentación es solo un eslabón de una larga cadena que empieza por romper la creencia de que somos partes sueltas.