Tony Buzan - Mapas mentales: Aprende a usar la herramienta de pensamiento más poderosa del universo

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Durante muchos años he utilizado los mapas mentales. Actualmente viajo por todo el mundo para enseñar a empresarios, figuras públicas y todo tipo de público a mejorar su memoria y sus habilidades cognitivas en su vida personal y profesional. Sin embargo, de niño se me diagnosticó dislexia, y creo que tenía problemas —que hasta cierto punto aún tengo— con la atención. He encontrado que el mapeo mental es una gran fuerza para mantener a raya la distracción del Trastorno por Déficit de Atención. En resumen, me ayuda a mantenerme en la ruta. Los mapas mentales son poderosas herramientas para focalizar y procesar información, elaborar un plan de acción e iniciar nuevos proyectos. En realidad, los mapas mentales son una inmensa guía en todos los aspectos de la vida, ¡y no puedo dejar de recomendarlos lo suficiente!

Además de proporcionar a los lectores los medios para transformar sus propias vidas, el nuevo libro de Tony, Mapas mentales, los incluirá en una dinámica comunidad global. Las historias y los ejemplos nos muestran que el mapeo mental es un fenómeno mundial que practica todo tipo de personas. Lo único que tienen en común es su pasión por los beneficios de esta herramienta del pensamiento y el compartirla con otros.

Estoy profundamente agradecido con Tony por haber inventado los mapas mentales, y recomiendo este nuevo libro a todo aquel que desee mejorar su pensamiento y alcanzar el dominio de los mapas mentales por sí mismo.

Dominic O’Brien,

Ocho veces Campeón Mundial
de Memoria y exitoso autor

—Busco libros que traten sobre cómo usar el cerebro.

—Intente aquí —dijo la bibliotecaria, señalando un estante de libros—, en la sección de medicina.

—No —le respondí—, ya he revisado esos títulos y no tengo ningún deseo de operar mi cerebro; sólo deseo aprender a usarlo.

La bibliotecaria me vio de manera inexpresiva. —Temo que no hay libros sobre ese tema —dijo—. Sólo los libros de texto que tenemos aquí.

Salí sintiéndome frustrado y asombrado. En mi segundo año en la universidad estaba en busca de nuevas formas de lidiar con una mayor carga de trabajo académico, ya que mis métodos de estudio sencillamente no estaban dando los resultados que buscaba. En realidad, mientras más notas tomaba el resultado parecía ser peor. Aunque aún tenía que valorar los límites del pensamiento lineal, ese día caí en la cuenta de que mi llamado problema en realidad representaba una increíble oportunidad. Si no había libros sobre cómo utilizar tu cerebro, entonces ése era un campo con un extraordinario potencial de investigación.

En los años siguientes estudié psicología y ciencias generales, neuropsicología, neurolingüística y semántica, teoría de la información, técnicas de memoria y mnemotecnia, así como percepción y pensamiento creativo. Llegué a comprender el funcionamiento del cerebro humano y las condiciones que le permiten desempeñarse a su máximo.

Irónicamente, mi investigación también destacó las deficiencias de mis propios métodos de estudio, al darme cuenta gradualmente de que mis apuntes se basaban en palabras y eran monótonos y aburridos; si tenían una virtud era que su formato lineal ofrecía una manera increíblemente efectiva ¡para entrenarme para ser estúpido! La práctica perfecciona: si practicas perfectamente, tu práctica te hace perfecto. Sin embargo, si practicas mal, la práctica te hace perfectamente malo. Cuando empecé a practicar cada vez más tomar notas de manera lineal y monótona, cada vez fui más y más perfectamente ¡estúpido! Tenía que modificar de manera urgente tanto mi pensamiento como mis actos.

Al estudiar la estructura del cerebro realicé el descubrimiento que buscaba. El hecho de que poseamos un mínimo de cien mil millones de neuronas, cada una de las cuales contribuye a nuestro pensamiento, fue inspirador. Me resultó apasionante que cada una de estas neuronas posea tentáculos que irradian del centro de la célula como ramas de un árbol, y me di cuenta de que podía emplear este modelo como un diagrama para crear una herramienta de pensamiento fundamental.

Ello demostró ser una gran contribución al desarrollo del pensamiento radiante, lo que a su vez condujo al nacimiento del mapa mental.

En su forma más simple, un mapa mental es un intrincado diagrama que refleja la estructura de una neurona con ramas que se expanden de su centro y que evoluciona a través de patrones de asociación. Sin embargo, desde su creación, a mediados de la década de 1960, el mapa mental ha demostrado ser mucho más que un excelente medio para tomar notas: es una forma eficiente y sumamente inspiradora para alimentar nuestros hambrientos intelectos, mentes y espíritus. Se ha desarrollado de manera exponencial y, como verán en este libro, puede aplicarse de muchas formas —desde fomentar la creatividad y fortalecer la memoria hasta contribuir a combatir la demencia.

A través de los años algunos han malentendido el mapa mental, en tanto que otros lo han distorsionado; sin embargo, persevero en mi visión de un mundo en el que cada niño y cada adulto comprenda lo que es un mapa mental, cómo funciona y cómo puede aplicarse en todos los aspectos de la vida.

Este libro aspira a mostrar cómo un buen mapa mental te puede nutrir como individuo, y la manera en la que éste sigue creciendo, expandiéndose y evolucionando con el objeto de encarar los nuevos desafíos que todos enfrentaremos en este planeta.

Y ahora, según nos adentramos en el siglo XXI, el mapa mental se puede consultar y utilizar en formas que reflejan nuestras novedosas y pujantes posibilidades técnicas. Los mapas mentales todavía pueden dibujarse a mano, están disponibles en línea, han sido trazados en la nieve del Ártico, han adornado las laderas de las montañas, e incluso los drones los pueden proyectar en el firmamento.

Acompáñame en esta gran aventura y prepárate para irradiar tu poder mental más allá de lo que lo has hecho hasta ahora.

Tony Buzan

¿Por qué es necesario este libro?

Un mapa mental es una revolucionaria herramienta de pensamiento que cuando se llega a dominar transforma tu vida. Te ayudará a procesar información, a tener ideas nuevas, a reforzar tu memoria, a sacarle el máximo partido a tu tiempo de esparcimiento y mejorará la forma en la que trabajas.

Al principio concebí el mapa mental como una forma novedosa de tomar apuntes que podía emplearse en cualquier situación en la que normalmente se tomarían notas lineales, como conferencias, llamadas telefónicas, reuniones de negocios, la investigación y el estudio. Sin embargo, muy pronto fue evidente que los mapas mentales también pueden utilizarse, entre otras cosas, para la innovación en el diseño y la planeación; para ofrecer una aguda visión general sobre un asunto; para inspirar proyectos nuevos; para descubrir soluciones y liberarse de formas de pensar poco productivas. En este libro encontrarás numerosas y apasionantes aplicaciones para los mapas mentales. Incluso pueden utilizarse, por derecho propio, para ejercitar tu cerebro y reforzar el poder de tu pensamiento creativo.

En este libro descubrirás cómo el mapeo mental puede ayudarte a acceder a tus propias inteligencias múltiples y a hacerte consciente de tu verdadero potencial. Los ejercicios prácticos que aparecen en él están diseñados para entrenarte en la forma expansiva de pensamiento, y descubrirás las historias de otras personas, incluyendo a maestros del mapeo mental y expertos de renombre mundial y pioneros en sus campos, cuyas vidas han sido transformadas radicalmente por el mapeo mental.

Tu cerebro es un gigante durmiente,

y Mapas mentales está aquí para

ayudarte a ¡despertarlo!

Una nueva forma de pensamiento

Cuando, en la década de 1960 introduje al mundo los mapas mentales, no sospechaba lo que tenía por delante. En las etapas preliminares de mi investigación sobre el pensamiento humano utilicé un prototipo inicial de mapeo mental para mejorar en mis estudios. Éste consistía en una forma de tomar notas en la que combinaba palabras y colores. Evolucionó cuando empecé a subrayar las palabras claves en mis notas y caí en la cuenta de que representaban menos del 10% de lo que había escrito. No obstante, estas palabras claves revelaban conceptos básicos. A través del estudio de los antiguos griegos supe que necesitaba encontrar una manera sencilla de establecer conexiones entre las palabras claves de manera que éstas pudieran memorizarse fácilmente.