Romain Parmentier - Pedro Álvares Cabral

• ¿Nacimiento? Hacia 1467 en Belmonte (reino de Portugal).
• ¿Muerte? Hacia 1520 en Santarém (reino de Portugal).
• ¿Contexto? Los grandes descubrimientos.
• ¿Objetivo de la expedición? Llegar a las Indias a través de la ruta marítima de las especias.
• ¿Regiones de mundo exploradas?
  • Brasil.
  • Mozambique.
  • Tanzania.
  • Kenia.
  • India.
• ¿Descubrimiento relevante? Brasil.

El 9 de marzo de 1500, una flota de trece navíos con mil quinientas personas a bordo zarpa de Lisboa hacia las Indias. A la cabeza se encuentra Pedro Álvares Cabral, un aristócrata portugués procedente de una familia rica y noble. Es la primera vez que se le confía el mando de una flota, y nada de lo que ha vivido al servicio del rey de Portugal lo ha preparado para lo que le espera. A pesar de no tener experiencia, desea asumir el desafío.

El objetivo de la expedición está claro: seguir la ruta marítima de las Indias que Vasco de Gama (navegante portugués, 1469-1524) acaba de descubrir y consolidar las relaciones comerciales entre Portugal y las Indias. Se trata de un gran reto para el reino de Portugal, que desea adueñarse del comercio de las especias que, en aquel momento, es próspero e imprescindible. Además, brinda la oportunidad de suprimir al intermediario otomano en el negocio de productos orientales.

El viaje se presenta turbulento para Cabral. Los vientos violentos y las tempestades acaban con varios de sus navíos, y cuatro de ellos se hunden frente al cabo de Buena Esperanza. En las Indias, la hostilidad árabe y las traiciones ponen en peligro el triunfo de su expedición. No obstante, el navegante no se viene abajo y somete por la fuerza a los enemigos de Portugal. Su misión, coronada con éxito, permite sobre todo descubrir Brasil, sinónimo de prosperidad para los portugueses.

Retrato de Pedro Álvares Cabral.

Pedro Álvares Cabral, procedente de la rica nobleza portuguesa, nace hacia 1467 en Belmonte, en Portugal. Es hijo de Fernão Cabral (fallecido en 1493) y es el segundo de una familia de once hijos. Tenemos muy pocos datos de su infancia, aunque se establece claramente que su familia es heredera de una larga tradición de servicio en la corte del rey. Por lo tanto, es natural que, a los diecisiete años, Cabral se ponga a disposición del rey Juan II (1455-1495). Cuando este último muere, continúa trabajando para Manuel I (1469-1521), con el que mantiene una buena relación. De hecho, en 1497, el rey lo nombra fidalgo («consejero»), lo que le concede el hábito de la Orden Militar de Cristo y una renta personal.

Retrato de Vasco de Gama.

En 1499, Vasco de Gama vuelve a Lisboa triunfante tras haber encontrado la ruta marítima que lleva a las Indias. Para el navegante, resulta crucial enviar lo más rápido posible una nueva flota para consolidar las conquistas efectuadas. Pero la travesía ha sido lenta y difícil y desea descansar. Entonces, se designa a Pedro Álvares Cabral para liderar este segundo viaje, aunque no tenga ninguna formación en navegación y nunca haya realizado un viaje similar.

El 9 de marzo de 1500, Pedro Álvares Cabral se pone a la cabeza de una flota de trece navíos con el objetivo de seguir la ruta que Vasco de Gama ha abierto y reforzar los lazos comerciales con las Indias. El navegante sigue las indicaciones de su predecesor y baja hacia el suroeste para aprovechar los vientos alisios. Sin embargo, estos vientos lo desvían hacia el oeste más de lo previsto. El 22 de abril de 1500, Cabral descubre el territorio que le dará la fama: Brasil. A continuación, prosigue su ruta hacia el cabo de Buena Esperanza y, a finales del mes de mayo, se enfrenta a una terrible tormenta que provoca la pérdida de cuatro navíos. Finalmente, el 13 de septiembre, la flota llega a Calicut (India), donde establece un punto comercial con el acuerdo de las autoridades locales. Sin embargo, la paz no dura mucho, puesto que, en diciembre, los árabes atacan el emplazamiento. Como represalia, Cabral ordena bombardear la ciudad durante un día. A continuación, el navegante abandona la ciudad y se dirige a Cochín, donde puede crear un punto comercial en buenas condiciones. La flota portuguesa, cargada de especias, inicia el regreso el 16 de enero de 1501 y llega a Portugal el 21 de julio.

El éxito comercial de la expedición anima al rey a enviar una nueva flota lo más rápido posible. Así, durante ocho meses, Cabral prepara los buques, pero en el último momento, se encarga el mando a Vasco de Gama. Para el navegante, esto constituye una verdadera ofensa. En seguida, decide abandonar la corte y dedicarse a la gestión de sus dominios cerca de Santarém. Pedro Álvares Cabral se retira de la vida pública, se casa en 1502 y tiene seis hijos. Fallece hacia 1520.

El viaje de Cabral, lejos de ser una expedición aislada, se inscribe más ampliamente en un contexto de exploración marítima que caracteriza a Europa en la Era Moderna. Es el momento de los grandes descubrimientos, que marcan progresivamente la apertura y la dominación del continente europeo sobre el resto de mundo. Portugal, que participa en ese movimiento, es un verdadero precursor en la materia.

A finales del siglo XIV, Portugal se asegura definitivamente su independencia con respecto a Castilla y ha terminado la Reconquista varias décadas antes que España. Por lo tanto, nada impide al recién creado reino que empiece su expansión por los mares. El infante Enrique el Navegante (1394-1460), auténtica figura destacada de esta política de exploración, dedica toda su vida a iniciar y financiar las expediciones portuguesas. El joven príncipe, enamorado de la geografía, se rodea de sabios y funda una escuela de navegación en Sagres (cabo San Vicente), donde impulsa los avances tecnológicos en el ámbito marítimo, y es que hay mucho en juego:

• dado que Portugal no puede expandirse más por la península ibérica, no le queda otra opción que obtener territorios de ultramar para su comercio;
• asimismo, su aprovisionamiento de productos agrícolas es limitado, lo que implica que debe buscar nuevos mercados y nuevos territorios;
• tal y como ocurre con otros países europeos, Portugal también se enfrenta a una disminución de sus reservas de oro y plata como consecuencia del agotamiento de los yacimientos europeos y de la fuga de los metales hacia Oriente, fruto del comercio de los productos asiáticos. La necesidad de encontrar nuevas fuentes de metales preciosos se convierte en una prioridad para no asfixiar la economía;
• el final de la lucha contra los musulmanes aún no está cerca, por lo que muchos europeos esperan encontrar el mítico reino del preste Juan para sumar aliados y llevar a cabo una cruzada definitiva contra los musulmanes.

UN REINO CRISTIANO MÍTICO

El reino del preste Juan es un misterioso territorio cristiano situado en Oriente, según la leyenda. El origen de esta historia se remonta a la Edad Media, y va ubicando el reino sucesivamente en Asia Central, en China, en India y, finalmente, en África Oriental. Lejos de ser un simple relato, el mito tiene una importancia considerable. De hecho, los europeos, enfrentados a la expansión musulmana, ven en el preste Juan a un aliado de envergadura que permitiría acorralar a los árabes y a los turcos y, en última instancia, salir vencedores del conflicto. Por consiguiente, la búsqueda del reino se convierte en un objetivo central de la exploración marítima e influye activamente en los inicios del movimiento de los descubrimientos.