Gabriela M. Raynaudo - Educar en el mundo digital

Vivimos en un mundo colmado de imágenes. McLuhan ya en la década de los ’60 anticipó como los medios “no escritos” modificarían la esfera social. Aunque el filósofo no logró presenciar la sociedad de la información en toda su magnitud, pudo predecir el impacto que las tecnologías tendrían en la vida cotidiana. Los niños no han quedado exentos de estos cambios y conviven desde muy pequeños con distintos tipos de dispositivos digitales. El propósito del presente libro fue estudiar en niños pequeños el aprendizaje mediado por imágenes digitales e impresas, así como el impacto de la instrucción en dicho aprendizaje. El estudio del aprendizaje mediado por objetos simbólicos es una temática sumamente importante ya que gran cantidad de los aprendizajes que realizamos acerca del mundo se encuentran mediatizados. En los últimos años, el universo simbólico se ha expandido por el amplio desarrollo de las tecnologías de la información y la comunicación. De este modo, los niños conviven con un sinfín de símbolos e imágenes representadas en distintos soportes más tradicionales, como un libro de imágenes en papel, o más novedosas como una tablet. En función de los tiempos que corren, numerosos planes educativos estatales y privados han trazado estrategias para incorporar dispositivos electrónicos en las aulas, incluyendo también al Nivel Inicial. Uno de los argumentos, entre otros, para fundamentar dicha decisión se sustenta en los beneficios que tendrían las tecnologías por sobre las herramientas más tradicionales. Sin embargo, en la actualidad la investigación empírica para afirmar dicha idea es escasa y los autores sugieren ser cautelosos ante este tipo de afirmaciones. Es por este motivo que resulta relevante estudiar el aprendizaje mediado por imágenes impresas y por imágenes digitales, tanto de libros (impreso y electrónico) como de aplicaciones electrónicas (APP).

Entendemos a las imágenes como objetos simbólicos cuya presentación varía en diversos formatos: desde los más tradicionales como dibujos, fotos, bocetos, mapas en soporte papel, y también, se han sumado recientemente las imágenes digitales presentes en dispositivos como tablets, smartphones, televisores, entre otras. Las imágenes se utilizan cotidianamente con diversas finalidades, sirven para comunicar, como apoyo mnemónico, para conmover y, también, como una herramienta de aprendizaje. Los libros de imágenes se utilizan desde hace mucho tiempo para enseñar en Nivel Inicial y en la actualidad se han sumado las imágenes en dispositivos electrónicos. Para lograr el objetivo del presente libro, se propuso una estrategia de investigación empírica cuasi-experimental transversal y se diseñaron tareas y materiales de investigación.

El libro se divide en dos partes. La Parte I, compuesta por los capítulos I y II, presenta los lineamientos teóricos generales y antecedentes de investigación. El capítulo I introduce precisiones acerca del desarrollo conceptual, aprendizaje de conceptos, la capacidad de justificar y dar razones en niños pequeños, el rol del contexto social y la instrucción en el aprendizaje. El capítulo II, desarrolla lineamientos teóricos acerca del aprendizaje mediado por imágenes. Para esto se aborda qué es una imagen y qué se entiende por objeto simbólico. Luego, se hace foco en el aprendizaje mediado por imágenes impresas, las características de las imágenes que promueven el aprendizaje, las imágenes digitales de aplicaciones móviles –APP-y libros electrónicos. En la Parte II se describe la investigación propiamente dicha. Esta sección, está compuesta por los capítulos III, IV, V y VI. Primero, el capítulo III expone la metodología general adoptada para el abordaje del problema de estudio planteado. Se describen las tareas de investigación desarrolladas, las muestras y las estrategias de análisis de los estudios realizados. Por último, se detallan los estudios incluyendo los resultados y las discusiones. El capítulo IV expone el primer Estudio de este libro, el cual explora y compara el impacto del tipo de instrucción (con y sin explicación) en el aprendizaje mediado por imágenes digitales e impresas en niños de 4 años. Asimismo, se evalúa la transferencia del conocimiento adquirido a través de imágenes impresas a imágenes virtuales y viceversa . Luego, se analizan las justificaciones conceptuales que utilizan los niños para sustentar sus elecciones antes y después de la interacción con un libro y con un libro electrónico. El Estudio 1A compara el aprendizaje por medio de un libro impreso en niños de 3 y 4 años, cuando los niños son instruídos. El capítulo V detalla el Estudio 2, el cual compara el aprendizaje de un concepto por medio de una aplicación interactiva variando la instrucción (instrucción grabada, instrucción presencial, instrucción guiada en interacción) en niños de 4 años. Finalmente, en el capítulo VI se desarrolla el Estudio 3 el cual explora la tenencia y hábitos de uso de tecnologías digitales en niños de 0 a 8 años. A modo de cierre, se incluyen las Consideraciones Finales donde se integran los resultados de los estudios y se reflexiona acerca de la implicancia de los mismos en la educación y en líneas futuras de investigación.

La capacidad de aprendizaje de los niños es asombrosa. Los primeros años de vida se considera que son los más importantes y los que más impactarán en el desarrollo. Desde el primer día de vida los niños entran en contacto con un mundo lleno de oportunidades y a partir de la interacción con los demás adquieren destrezas y habilidades para desenvolverse en este nuevo entorno. La capacidad de aprender y enseñar intencionalmente son características que nos distinguen del resto del reino animal (Tomasello, 2000). Cómo aprenden los niños a desempeñarse y moverse por el mundo es una pregunta que ha sido abordada desde distintas perspectivas teóricas.

Piaget (1972), nutriéndose del idealismo kantiano, plantea la existencia de estructuras cognoscitivas que ordenan la experiencia. Sin embargo, una diferencia fundamental entre Piaget y Kant es que para Piaget las estructuras a priori no son preestablecidas, sino que se desarrollan y construyen progresivamente.

El constructivismo piagetiano considera que los seres humanos no acceden a una realidad objetiva externa, sino que esta se construye. El conocimiento entendido como construcción no constituye una copia de la realidad, sino que conocer el objeto es transformarlo en función de esquemas mentales (Piaget, 1991). El sujeto es un organismo en desarrollo no solo en sentido físico o biológico, sino en un sentido cognitivo (Piaget, 1970).