Lydia Garcia Lopez - Elixires Florales y Gestalt

Realizada por Lydia García López Presentada por Graziela Andaluz  PRÓLOGO.
 INTRODUCCIÓN.
 LOS ELIXIRES FLORALES.
 Historia.
 Edward Bach, médico gestáltico.
 Cómo se obtienen.
 Bases, fundamentos, y principios.
 Visión del hombre.
 Visión de la planta.
 Mecanismos de acción en el hombre.
 Efectos.
 GESTALT Y ELIXIRES FLORALES.
 Similitudes y diferencias.
 Polaridades.
 Mi práctica con las esencias y la gestalt.  LA EXPERIENCIA PERSONAL CON LA TESINA. Os voy a contar a grandes rasgos cómo llegaron a mi vida y la importancia que han tenido para mí.

Yo estudié medicina, la insatisfacción desde los primeros cursos era grande y fue aumentando cuanto más contacto tomaba con la clínica y la terapéutica. Sentía que " así sólo no se podía curar realmente nada". Tomé contacto con la medicina natural estudiando esta forma de curación. Por la misma época comencé a trabajar en Yoga Clásico con el profesor Harold Siqueira, su forma de enseñanza era muy parecida a lo que luego conocí con el nombre de gestalt; aquí se abrió mi mente a otra concepción del hombre, su aspecto espiritual.

La falta en aquel tiempo, en Bilbao, de material y posibilidades para profundizar en la medicina natural junto con esta nueva apertura me fue llevando a conectar 'casualmente" con un grupo de formación en Bioenergética y Gestalt que organizaba Antonio Asín Cabrera ( he de reconocer que no tenía ni idea de qué se trataba, sentía una inquietud y buscaba, esto se me había puesto en el camino y mi olfato me decía ¡vamos! ). Así entré en el mundo de la psicología.

Al tener la primera impronta de formación en medicina, estos nuevos conocimientos no sabía cómo y dónde integrarlos, así fueron creciendo aparte y sin conexión Con el tiempo tuve dentro de mí dos lugares:

La MÉDICO Y LA PSICOTERAPEUTA, sin contacto y opuestos, lo cual generaba en mí una constante insatisfacción y desvalorización; me sentía atrapada.

Un día, " por azar ", hojeando una revista argentina en la consulta de unas amigas, vi una minúscula reseña de un libro recién publicado de la psicoanalista María Luisa Pastorino sobre flores de Bach. Mi olfato me indicaba que esto era lo que buscaba. Me movilicé hasta conseguir el libro y los elixires, y empecé a usarlos conmigo y con los pacientes. A partir de aquí comienza el camino de restablecimiento de la relación entre mí médica y mi psicoterapeuta interna. Las flores me han ayudado y me ayudan no sólo a esta integración, sino también me ha permitido cristalizar procesos personales ya maduros, a sembrar el germen de nuevos, y a abrir mi conciencia a diferentes planos.

Les estoy, junto con todos los maestros y compañeros de este camino, muy agradecida.

Al escribir sobre estos dos sistemas terapéuticos, uno de mis temores y horrores era estar todo el tiempo "en gestalt esto ... en los elixires lo otro..." o contando lo que ya sabéis de gestalt o que fuese un trabajo más para un congreso de elixires florales (que creo que se han cumplido pero sin horror). Me ha situado frente a estos miedos y me ha dado permiso para expresarme dentro de mis posibilidades el darme cuenta que los elixires o cualquier otra cosa que mire la veo a partir de los modelos psicológicos que tengo interiorizados, gestalt, bioenergética, movimiento. Del fondo, que es mucho más de lo que yo veo, voy a destacar las figuras, siempre desde estos modelos aunque no me lo proponga. Así, todo lo que he escrito lo haya explicitado con palabras o no tiene este enfoque. Espero y deseo que no sólo lo perciba yo sino que haya podido transmitirlo.

La he dividido en cuatro apartados a modo de sandwich, el primero y el último son personales y en el medio el tema que desarrollo. En él explico qué son, cómo funcionan los elixires, con la intención de que se entienda de qué estoy hablando, después expongo cómo veo y porqué la relación. entre la gestalt y los elixires, y el trabajo con estos dos sistemas integrados.

Mi estilo no es precisamente literario, provengo de las ciencias y lo noto a la hora de explicarme. La calidez y emoción que no he podido transmitir con palabras la he intentado aportar con las imágenes que he elegido para ilustrarla.

Una pequeña mirada hacia atrás para ganar un poco de perspectiva y poder situar los elixires florales en el tiempo. Es también una mirada a la evolución de la conciencia en relación a la polaridad ESPÍRITU CUERPO, ENERGIA  MATERIA.

El uso del Reino Natural y, más concretamente, del Vegetal en la sanación es universal y aparece en todas las culturas de la tierra y en todos los tiempos. Lo que ha ido variando es el "desde dónde" y bajo qué paradigma se dan.

por tanto intuitivo y comprensivo.

Hasta el nacimiento de la ciencia como hoy la conocemos, la visión y el acercamiento al mundo natural era desde la confluencia ; unas civilizaciones desarrollaron más un polo en detrimento del otro (como la hindú, el espíritu en detrimento de la materia o Maya) pero en la conciencia humana seguían siendo un mismo campo con dos aspectos. El conocimiento era

En la Edad Media, un período de internase entre un espiritualismo material y el materialismo científico posterior, sobresale Santa Hildegalda de Bingen (s. XII), una mujer que penetra en el conocimiento de la música, política, historia, naturaleza y sanación. Ella se interesa por las propiedades curativas del rocío, precursor directo de los elixires florales y estudia el mundo natural, estableciendo una comprensión energética de él.

Paracelso, médico alquimista del siglo XVI, integra a la observación comprensiva desde el corazón la observación mental analítica. Se distancia y separa para observar, a la vez que es consciente de que forma parte del proceso que observa. Desarrolla muchos trabajos y estudios; entre ellos desarrolla la Ley de las Analogías: "La forma nos habla directamente de la cualidad o propiedad del remedio, estableciendo una relación de similitud entre la enfermedad y su remedio" .

En el Renacimiento, por el desarrollo de una mayor capacidad de abstracción y análisis intelectual junto con el anhelo de conocer, explorar y manejar la materia, el hombre deja a un lado el polo espiritual, rompiendo con la confluencia y se interna de lleno en la materia. Lo hace como un observador separado de lo que observa y sin relación. Define netamente la constitución de plantas, animales, componentes..., de todo lo que entra en su campo de observación, pero la relación entre las diferentes formas y el todo ha pasado a ser fondo. Es el nacimiento de la ciencia como la conocemos, y que ha permitido saber de la materia desespiritualizada, desde las regiones estelares hasta las partículas subatómicas más minúsculas y, lo reconozca o no, está traspasando los límites del polo material y tocando el espíritu.

Volviendo a los momentos históricos en los que podemos encontrar el germen de los elixires florales como los conocemos hoy, llegarnos al siglo XVII con Goethe, escritor y científico, que aporta una concepción sensible y suprasensible en la dimensión material y espiritual de las plantas. Rescata el conocimiento de la forma de la planta, a la que llama "Gesto", y reconoce en él la expresión de la cualidad esencial de ésta. Enuncia el concepto de Planta Arquetípica o matriz energética susceptible de dar vida a todas las plantas.