Sociedad Agni Yoga Hispana, Inc.
PO Box 9447, Caguas Puerto Rico 00726
Traducción Española © 2006 Sociedad Agni Yoga Hispana, Inc.
Publicado 2006.
Reimprimido Noviembre 2016.
Publicado originalmente como
Brotherhood. New York: Agni Yoga Society, 1962.
© 1962 by Agni Yoga Society.
Signos del Agni Yoga
Aquello que es lo más sagrado envuelve el concepto de Hermandad.
Aquello que es lo más jubiloso vive con la conciencia que existe cooperación de Conocimiento.
Pensamiento como aquel afirma que en alguna parte están viviendo los Verdaderos Colaboradores.
Recordemos los fundamentos que conducen a la Hermandad.
HERMANDAD
1. Consideremos un concepto que está extremadamente sobrecargado. En medio de la vida diaria la gente asimila con dificultad la comprensión de lo que es la cooperación, sin embargo, mucho más difícil e inaccesible para ellos es el concepto de la Hermandad. La herencia corporal, esto es, la relación consanguínea, impide la aceptación del concepto de la Hermandad. Para la gente es más sencillo desconocer por completo cualquier comprensión del Mundo de la Hermandad. Ellos prefieren llamarlo más bien utopía antes que reflexionar sobre la posibilidad de aplicarlo en la vida.
Si incluso, en el estrecho mundo de la vida doméstica la gente no halla dentro de sí misma la afirmación de la hermandad, entonces en el amplio sentido, les puede parecer algo poco práctico. Además, la gente lee con poca atención los antiguos Mandamientos, los que hablan acerca de un gran número de Hermanos y Hermanas.Asimismo, los recuerdos de la gente acerca del Mundo Sutil se han nublado. Sólo allí es posible encontrar una amplia realización de la Hermandad. El cuerpo impide la vía a muchas amplias ideas. Únicamente el irse más allá de los límites de la comprensión corporal hará que sea posible el reconocimiento de la cooperación fraternal. Reunamos los signos de un semejante estado de conciencia expandido.
2. La gente ha intentado sellar la unión de la hermandad con sangre. Ellos han derramado la sustancia más preciosa con el propósito de obtener el estado de Hermandad. Escuchando todas las canciones sobre la Hermandad uno percibe un maravilloso poema de los sueños de la humanidad. Si uno agrupara todas las costumbres que se han acumulado alrededor del concepto de Hermandad, uno llegaría a conocer un testimonio extraordinariamente conmovedor de las aspiraciones de los pueblos. La manifestación de los logros en el nombre de la Hermandad revela que a la abnegación siempre se la ha vinculado con estos empeños del corazón puro. Sin embargo, precisamente ese concepto de Hermandad es especialmente profanado y envilecido.
3. Aún las mejores adiciones al concepto de Hermandad sólo lo han degradado y han hecho que sea difícil alcanzarlo. Este concepto ha sido vinculado con el de libertad e igualdad, mas su trinidad fue concebida en el sentido terrenal, es decir, bajo condiciones en que ni la libertad ni la igualdad existen.
La libertad más elevada puede ser realizada en el Mundo Supramundano, donde las leyes son entendidas como una realidad hermosa e inmutable. Allí, también, es entendida la igualdad de la semilla del espíritu, siendo esta la única medida de liberalidad y equilibrio. Usualmente, a las estatuas terrenales representando a la libertad, se les provee de alas o antorchas, recordándonos así las esferas y condiciones elevadas.
Existe una anécdota respecto de las imágenes representando a la igualdad: Cuando una vez un escultor recibió la orden de esculpir mil estatuas de estas para ser usadas en la decoración de una triunfal avenida, él hizo una estatua y propuso usarla como molde para el resto.
4. Raramente es posible conversar acerca de la Hermandad. Precisamente en los períodos de gran obstinación e intolerancia terrenal no es inusual observar que la gente, por decirlo de algún modo, se ha puesto de acuerdo para envilecer este concepto. Ya las antiguas costumbres de hermandad a través de la unión de la sangre se han vuelto tan amenazantes para toda la raza humana, que la venganza más primitiva se podría considerar como una travesura de niños.
Tú sabes que Yo estoy hablando acerca de algo que particularmente necesita reforzarse.
5. Si tú entras en una reunión de personas con las palabras, “Amigos y colaboradores,” la mayoría te mirará de manera sospechosa. Mas si tú te atreves a llamarlos hermanos y hermanas, entonces muy posiblemente te denunciarían como alguien que ha pronunciado palabras inadmisibles.
Algunas veces la gente establece hermandades, pero esas instituciones superficiales y pomposas nada tienen en común con el gran concepto de la Hermandad. Así empieza la gente las comunidades, las cooperativas, diferentes asociaciones y sociedades; mas en sus fundamentos no existirá ni la más sencilla de las verdades. En consecuencia, estos establecimientos están muy lejos de aquella Hermandad que es una fuerte e inalterable unión de confianza.
Podría ser que en estos momentos ciertos corazones muy refinados estén ya soñando acerca de la creación de organizaciones donde la confianza sería la piedra angular. No se puede insistir en que todo está mal, cuando el ojo humano ve sólo algunos de los detalles de la época que se acerca.
Sobre los fragmentos de los símbolos antiguos uno puede observar la vitalidad de los conceptos básicos. Justamente cuando desde el punto de vista terrenal todo ha sido transgredido, podría ser que al mismo tiempo estén naciendo los más hermosos conceptos.
6. ¿Cuándo, entonces, debería uno hablar de los conceptos necesarios? Particularmente cuando ellos hayan sido transgredidos. Entonces, precisamente, hablemos de ellos cuando la gente ya los considere sin esperanza. ¿Por qué justamente ahora Nosotros traemos a la memoria la Hermandad? Mas la gente en su desesperación vendrá a buscar las esparcidas semillas de la predestinada Comunidad Fraternal. No nos confundamos con las oscilaciones del péndulo de la vida. La desesperación puede ser la precursora de la recuperación de la visión.
7. De manera correcta se ha observado que ciertos rayos son captados con especial dificultad, como también todo aquello relacionado con estos rayos. Esta es la razón por la que Nosotros no tratamos de coaccionar a otra conciencia que ha sido armonizada de manera diferente. La compulsión no es un atributo de la convicción. Es imposible ordenar amistad y esto se aplica especialmente a la Hermandad. Estos conceptos requieren desinterés y una comprensión de los fundamentos.
Si el amplio concepto de Hermandad se ha rebajado a una relación consanguínea, esto significa que la conciencia se ha empobrecido grandemente. La conciencia, con frecuencia es tan limitada que la gente no puede entender para nada qué formas de hermandad podrían existir fuera de la relación consanguínea. Se han designado grados de parentesco como “primos hermanos,” “primos segundos” e incluso “primos en tercer grado,” mas la imaginación titubea y no quiere ir más allá. Se podrían compilar muchos libros de convencionalismos que se han acumulado alrededor del concepto de Hermanad.
En épocas antiguas, diferentes pueblos han enfatizado la importancia de la Hermandad. El fratricidio fue considerado un grave crimen. Detrás de todo esto se puede percibir una reverencia por ciertos estados exaltados; con medidas fuertes la gente salvaguarda algo que no tiene cabida en sus pensamientos diarios. La razón niega este “algo,” mas en las profundidades de su fuego, el corazón lo afirma. El corazón palpitó con la belleza del significado de la Hermandad. Nuevamente la humanidad se volverá hacia el corazón y comprenderá la esencia de la Hermandad.