Introducción
Quizá pienses que se escribe demasiado sobre felicidad y es muy posible que no vayas desencaminada. En ocasiones nos ofrecen fórmulas infalibles que conseguirán hacerte feliz en un tiempo récord. ¡Wow! Lo que todas queremos en la era de la inmediatez, Internet y la pastilla mágica.
Aquí no te diré lo que tienes que hacer; al leer este libro, lo vas a tener que decidir tú y responsabilizarte de ello. Hacernos cargo de nuestra felicidad es el primer paso para ser y sentirnos felices. Lo demás son felicidades trampantojo, efímeras, de cartón piedra, sin garantía, de careta sonriente y frustración asegurada.
Puede que creas que has escuchado ya todo sobre el tema; aun así, no subestimes la información que recibes, aunque ahora no conectes con ella. A todo se le puede sacar provecho, y tal vez en algún momento te sirva saber qué hacer o evitar. Y, en cualquier caso, por mucho que te digamos, decide lo que quieras.
Si estás leyendo este libro, quizá sea porque aún no la has integrado ni estás disfrutando la vida que quieres. Escuchar, escuchamos muchas cosas, pero no las integramos ni ponemos en práctica todo. Si te interesa, es porque hay algo que aún no estás utilizando en tu vida para sentirte feliz, para descubrir y disfrutar tus felicidades. Pero no te preocupes, para conseguir tu objetivo tienes toda la vida. Y si lo estás leyendo, es que sigues viva, así que, ¡enhorabuena!
Si lo lees, conectas y no lo aplicas, no sirve de nada. Te toca generar rutinas o hábitos. Hay que entrenarlo. E incluso aceptar que lo que sirve a muchas personas puede que contigo no funcione.
¿No te parece emocionante?
Creo que somos todo en potencia. Podemos ser simpáticas o antipáticas, ¿verdad? No venimos siendo de una manera o de la otra. Vamos aprendiendo por repetición, fijándonos en modelos de una u otra forma de ser, por imitación, mediante instrucciones que recibimos y fijándonos en las actitudes de quienes nos rodean. Recibimos muchos estímulos, que nos hacen sentir diferentes sensaciones y emociones. Algunas las seguimos y otras las descartamos, y solo expresamos y se ve de nosotras aquello que ponemos en práctica. Somos nuestros actos. Lo demás se queda dentro y podemos utilizarlo en otros momentos, o quizá nunca lo hagamos.
Así pues, poder, podemos. Que nadie diga que no es capaz de entrenar su felicidad. Está en nosotras ya desde el inicio, también las herramientas para disfrutar de ella, lo que ocurre es que no somos consciente de ello o no creemos en nuestro potencial. Por eso no las estamos utilizando.
Recuerda que las cosas no las vemos como son, sino como las filtramos nosotras. Si crees en tu potencial de felicidad, podrás sentirlo, vivirlo, expresarlo y compartirlo.
Además, puede que este sea el primer libro sobre felicidad con perspectiva de género y lenguaje inclusivo, al menos esa es la idea. Porque, a pesar de mi experiencia profesional sobre el tema, no negaré que, como a ti, me ha costado bastante detectar y entender que ha de estar presente en todo. Hasta en las felicidades humanas. Y aunque no te lo hayas planteado, todo esto afecta a nuestra felicidad, independientemente de tu género o identidad, al igual que reconocernos diversos en muchos aspectos e iguales en tantos otros.
Por eso mismo he decidido escribir hacia las personas, como ya hice en mi primer libro. De modo que notarás que escribo en femenino, singular o plural.
Así que no dudes que este libro también es para ti, si eres persona. Aunque sin duda le afectará a cualquier ser de tu entorno, como tu gato o perro, aunque no lo sea.
Es para ti si deseas ser, o mejor dicho, expresar y conocer, a una persona feliz.
Porque feliz ya lo eres. Ahora toca reconocerlo, aceptarlo y ponerlo en práctica.
A lo largo de esta obra te mostraré diversos conocimientos, ideas y ejercicios para gestionar y generar felicidades. Rutinas depurativas o de higiene mental, para transformar hábitos «antifelicidad », y detectar y reconstruir tu propia felicidad.
¿Te parece complicado todo esto? No lo creas. Solo habrá una cosa especialmente difícil en todo el camino: que te des cuenta de lo sencillo que es sentirte feliz. Una vez conseguido esto, lo demás viene rodado.
Además, no estaremos solas, pues tendremos a Pollo, mi compañero de viaje que, ahora, será también tuyo. Es «el pollo que da apoyo» y, aunque no lo creas, es de mucha ayuda, porque las cosas contadas por un pollo suenan distintas. Ya sabes, desdramatiza y pone los problemas en perspectiva.
En ocasiones, reducir las situaciones al absurdo es una efectiva estrategia de reestructuración cognitiva. Así, la percepción de amenaza que podemos proyectar respecto a un suceso se bloquea y gestiona más fácilmente. Visualiza a Pollo, imagina cómo te habla y caricaturiza esa situación que te aleja de tu estado de felicidad. Hazlo con tacto, cariño y sentido del humor Verás cómo las expectativas negativas desproporcionadas se difuminan y te muestran la enseñanza que subyace.
Nos presentará historias o curiosidades, incluso puede darte alguna pista o truco para que te cueste menos descubrir tus felicidades y entrenarlas.
Pero no es un pollo imaginario, aunque sea de goma. ¡Pollo existe!, y me acompaña en formaciones y conferencias, lo lanzo al público y esas cosas que hacemos las psicólogas disfrutonas; además de sacarlo de vez en cuando en consulta, cuando ya hay confianza, claro. Se encarga de desatar la risa, y eso es una maravilla para generar complicidad y trabajar a gusto.
Las personas con un toque de locura
cambian el mundo.
Porque, como mi Pollo siempre dice: «La letra con risa entra». Así que, ya sabes…
Si no encuentras la felicidad, yo te doy a-pollo.
CAPÍTULO 1
Felices por la vida
Estar mal está bien
Te voy a confesar una cosa. Mi vida ha cambiado radicalmente mientras escribía este libro, como no podía ser de otra manera porque me ha pasado algo muy grande. Casi tan complicado como maravilloso. Casi tan agotador como revitalizante. Casi tan esclavizante como liberador.