ANEXO I
¿QUÉ HACE DE ESTA INICIATIVA UNA PROPUESTA HUMANISTA?
Momento Humanista.
En la actualidad, un momento humanista y contribuirán a romper nuestras creencias y supuestos culturales. Uno de estos efectos demostración, en este mundo tan interconectado, sería la implantación de una RBUI que serviría como modelo de inspiración para otras comunidades en todo el mundo. Apoyando a los jóvenes estamos apoyando precisamente el surgimiento de un momento humanista. La implantación de la RBUI otorgaría mayor libertad a los jóvenes para profundizar en sus verdaderas aspiraciones.
De la actitud común a los humanistas de todas las culturas y que permitió el surgimiento de esos momentos históricos, cabe destacar las siguientes características que relacionamos claramente con la RBUI:
1. La ubicación del ser humano como valor y preocupación central, de tal modo que nada esté por encima del ser humano y que ningún ser humano esté por encima de otro. La RBUI permite poner el dinero al servicio del ser humano, y no el ser humano al servicio del dinero.
2. La igualdad de todas las personas, superando la simple formalidad de iguales derechos ante la ley, para avanzar hacia un mundo de iguales oportunidades. La RBUI otorga una base de subsistencia mínima, propiciando cierta igualdad de oportunidades.
3. La diversidad personal y cultural, afirmando las características propias de cada pueblo y condenando toda discriminación que se realice en razón de las diferencias económicas, raciales, étnicas y culturales. La RBUI, al garantizar la subsistencia, permite una mayor libertad de elección personal y, por tanto, una mayor diversidad.
4. La tendencia al desarrollo del conocimiento, por encima de las limitaciones impuestas al pensamiento por prejuicios aceptados como verdades absolutas o inmutables. La RBUI libera energía (tiempo físico y psicológico) para desarrollar nuevos conocimientos. Por otro lado, la misma puesta en marcha de la RBUI rompe con prejuicios y «verdades» firmemente arraigadas.
5. Libertad de ideas y creencias. La RBUI facilita que cada persona pueda elegir cómo quiere vivir y en qué condiciones, y requiere que cada cual respete la elección del otro.
6. Superar la violencia física, económica, racial, sexual, religiosa, moral y psicológica, como casos cotidianos arraigados en todas las regiones del mundo. La RBUI disminuye la violencia económica y facilita la solución de otras muchas formas de violencia: de género, racial, religiosa, psicológica, etc.
LA RBUI Y LA VISIÓN DEL SER HUMANO EN EL NUEVO HUMANISMO
Con la RBUI, el valor de la vida humana deja de sustentarse en el empleo y se pone el énfasis en el valor intrínseco que tiene todo ser humano por el mero hecho de nacer. Ayuda a poner en el centro la existencia humana, desplazando al dinero como máximo valor. La RBUI permite mayor libertad, puesto que impide la apropiación de unos seres humanos por otros, utilizándolos como fuerza de trabajo, lo cual es la base de la violencia económica. El ser humano es libertad y apropiarse de su intención es la mayor forma de violencia.
El tiempo verdaderamente humano es el futuro. La RBUI, al proporcionar una base económica segura, ayuda a proyectar ese futuro sin temor a la pobreza y a afrontar las actividades de la vida cotidiana con mayor tranquilidad y libertad.
El ser humano no es un ser natural, es un ser histórico y social, cuya lucha por superar los condicionamientos de todo tipo ha permitido el progreso del que disfrutamos actualmente. Con la RBUI se hace justicia, devolviendo parte de la riqueza y el saber acumulado por las generaciones que nos precedieron a sus verdaderos herederos, que son toda la especie humana, y no solamente aquellos que se han apoderado del patrimonio común de forma ilegítima.
¿ESTÁ LA RBUI EN CONSONANCIA CON LOS PUNTOS BÁSICOS DEL DOCUMENTO HUMANISTA?
En el documento fundacional del Movimiento Humanista, se declara que:
«[…] Ha de pasarse de la prehistoria a la verdadera historia humana, cuando se elimine la violenta apropiación de unos seres humanos por otros… El humanismo pone por delante la cuestión del trabajo frente al gran capital; la cuestión de la democracia».
Está claro que la RBUI no es la piedra filosofal, ni que con ella, y por sí sola, vayamos a pasar «de la prehistoria a la verdadera historia humana». Habría que actuar desde una mirada estructural y efectuar los cambios necesarios en cada una de las cuestiones que se enumeran en el documento humanista. Lo que sí vemos es que la RBUI puede influir positivamente y de forma transversal en cada una de las cuestiones y que, sin duda, actuando en uno de los puntos, se modificaría la estructura general.
Con la RBUI, los trabajadores mejorarían su capacidad negociadora frente al gran capital, no solo a nivel individual, sino también colectivamente. Y es una buena herramienta para acabar con el efecto disciplinador del temor al paro.
Es evidente que con la RBUI, parte de las ganancias del capital especulativo pasarían a formar parte de lo que se llama economía real.
Decían los antiguos filósofos republicanos que solamente los ciudadanos libres pueden participar de la democracia y que es condición para ser ciudadano libre tener la existencia material garantizada. Es de sobra conocido el voto del miedo, casi siempre vinculado a cuestiones económicas. La eliminación del temor a la pobreza es, sin duda, un paso hacia la democracia real. La gente sería más libre a la hora de votar y podría canalizar sus exigencias hacia otros aspectos más allá de las cuestiones económicas. La RBUI permitiría una mayor participación política de la gente al disminuir el temor a las represalias del político de turno. Y sobre todo, aceleraría el cambio social al permitir una mayor participación de los jóvenes en la vida pública.
En la cuestión de la descentralización, habría que estudiar formas de financiación alternativas, dando mayores competencias a las comunidades regionales y municipios, de manera que estos dependiesen menos de la administración central.
La RBUI contribuiría a que las motivaciones que impulsan las reivindicaciones de autodeterminación no fuesen económicas, al tiempo que haría disminuir las tensiones entre los que se oponen a ello.
Está demostrado que los sistemas de rentas condicionadas no son capaces de acabar con la pobreza, ya que mantienen a los perceptores atrapados en el temor a la pérdida del subsidio. Sin duda que las limitaciones de las rentas condicionadas abonan el terreno de la discriminación y fomentan el enfrentamiento de los penúltimos contra los últimos de la escala económica. Pasar de un sistema basado en la caridad a otro basado en la justicia social sería un gran paso en la eliminación de la violencia económica y la discriminación.
Desde un punto de vista humanista, libertad es la posibilidad de elegir entre condiciones, que es algo que va mucho más allá de lo meramente económico. Pero es cierto que si las personas no tienen cubiertas sus necesidades más básicas, se complica enormemente la posibilidad de poder atender otras necesidades relacionadas con el sentido de sus vidas. Desde nuestro punto de vista, es necesario superar el humanitarismo basado en la caridad, para pasar a un verdadero humanismo basado en la justicia social.
En el momento actual, están surgiendo con fuerza posiciones antihumanistas, que, como en otras épocas, en momentos de asfixia de las poblaciones, explotan este malestar, canalizándolo hacia los inmigrantes y las gentes más desfavorecidas. El reclamo de la RBUI pone la atención en las cuestiones fundamentales de la violencia económica y da la oportunidad de fortalecer posiciones y valores humanistas frente a las fuerzas del antihumanismo.