NORMAN DAVIES Sir (Bolton, Lancashire - 8 de junio de 1939) es un historiador inglés, conocido por sus publicaciones sobre la historia de Polonia y las islas británicas.
Discípulo de A. J. P. Taylor, Davies estudió historia en el Magdalen College de Oxford. Tras sus estancias en Grenoble, Francia, Perugia, Italia, y Sussex, Inglaterra, intentó realizar su doctorado en Rusia, pero le fue denegado el visado de entrada. Entonces se dirigió a Cracovia para estudiar en la Universidad Jaguelónica e investigar la guerra polaco-soviética.
A partir de 1971, comenzó a enseñar historia de Polonia en la Escuela de estudios eslavos y europeos del este (SSEES) de la Universidad de Londres, de la que fue profesor entre 1985 y 1996. En la actualidad trabaja en el Wolfson College de la Universidad de Oxford.
Entre sus publicaciones cabe destacar: White Eagle, Red Star: The Polish-Soviet War, 1919-20 (1971, ed. 2004); God's Playground: A History of Poland (1981); Europe. A History (1996); Varsovia, 1944 (2004, traducido en 2005); Europa en guerra 1939-1945 (2006, traducido en 2008) y Reinos desaparecidos. La historia olvidada de Europa (2011, traducido en 2013).
Fotografías 1
Punto crítico: la ciudad libre de Danzig
La Sociedad de Naciones había declarado Danzig (actual Gdańsk), que reclamaban Alemania y Polonia, una ciudad-estado independiente.
El antiguo puerto hanseático.
Manifestación nazi en agosto de 1939: «Danzig es una ciudad alemana y quiere unirse a Alemania».
Preludio de la guerra
El incidente de Nomonhan; agosto de 1939. Tropas japonesas marchan hacia la derrota en el río Jaljin, en la frontera soviética de Mongolia Exterior. La victoria dejó al Ejército Rojo las manos libres para intervenir en Europa.
El Pacto Germano-Soviético del 23 de agosto de 1939 dio luz verde diplomática a la guerra. Ribbentrop firma ante un Stalin radiante. «Sé —dijo Stalin— que la nación alemana adora a su Führer». Hitler señaló: «Tengo el mundo en el bolsillo».
Operaciones conjuntas
La primera salva: 1 de septiembre de 1939. El crucero alemán Schleswig-Holstein inicia el conflicto abriendo fuego sobre la plaza fuerte polaca de Westerplatte.
23 de septiembre de 1939, los tanques del Ejército Rojo se unen a la Wehrmacht en el desfile de la victoria de Brześć (antiguo Brest-Litovsk) antes de dividir Polonia en dos esferas de ocupación: la soviética y la alemana.
Cómplices en el crimen
Adolf Hider, Führer, y Iósif Stalin, Vodz: socios desde 1939 hasta 1941, enemigos entre 1941 y 1945.
El Reichsführer de las SS Heinrich Himmler y el jefe de la NKVD Lavrenti Beria. En Yalta, el presidente Roosevelt señaló a través de la mesa y preguntó a Stalin: «¿Quién es el hombre de los quevedos?». Stalin repuso: «Es Beria, nuestro Himmler».
Estrellas fugaces
Benito Mussolini, Il Duce, fue destituido en 1943 y asesinado en 1945; y el mariscal Philippe Pétain, héroe de 1918, fue presidente de la Francia de Vichy entre 1940 y 1945.
El mariscal Erich von Manstein, autor de la victoria alemana en el oeste en 1940, fue relevado del mando en 1944; el mariscal soviético Grigori Kulik fue comandante en jefe en Polonia y en Finlandia, 1939-1940, y, contra todo pronóstico, sobrevivió.
Ataques a Escandinavia, 1939-1940
Tras la invasión de Finlandia y las ocupaciones de Noruega y Dinamarca, Suecia se vio forzada a un remedo de neutralidad.
Guerra de Invierno. Los hábiles soldados finlandeses resisten con valor la invasión soviética.
Narvik. La Fuerza Expedicionaria británica-francesa-polaca fracasó en su intento de impedir la invasión alemana de Noruega.
La caída del frente occidental, mayo-junio de 1940
El Arco de Triunfo de los Campos Elíseos. Una Wehrmacht victoriosa desfila por París antes de convertir Francia en un estado cliente y desarmado.
La batalla de Inglaterra. Gracias a la RAF, Gran Bretaña resistió a pesar de la derrota de sus fuerzas terrestres. Hitler pospuso la «Operación León Marino» y dio prioridad a la invasión de la Unión Soviética.
El botín del Este, 1940-1941
Stalin y Hitler continúan repartiéndose el este de Europa.
La desaparición de los estados bálticos. Delegaciones comunistas escogidas a dedo piden a Moscú que acepte la incorporación de Estonia, Letonia, Lituania y Moldavia a la Unión Soviética.
Estragos en los Balcanes. En dirección a Atenas, las tropas alemanas se detienen en Belgrado, frente al parlamento yugoslavo.
«Operación Barbarroja», 1941
Todo el peso de la maquinaria de guerra alemana cayó sobre la Unión Soviética, que antes de detener la marea pasó seis meses sin apenas tenerse en pie.