NO SE
TRATA
DE MÍ
NO SE
TRATA
DE MÍ
Rescatados de una vida
que creímos nos
haría felices
MAX
LUCADO
© 2011 por Grupo Nelson®
Publicado en Nashville, Tennessee, Estados Unidos de América. Grupo Nelson, Inc. es una subsidiaria que pertenece completamente a Thomas Nelson, Inc. Grupo Nelson es una marca registrada de Thomas Nelson, Inc. www.gruponelson.com
Título en inglés: It’s Not About Me
© 2004 por Max Lucado
Publicado por Thomas Nelson, Inc.
Todos los derechos reservados. Ninguna porción de este libro podrá ser reproducida, almacenada en algún sistema de recuperación, o transmitida en cualquier forma o por cualquier medio —mecánicos, fotocopias, grabación u otro— excepto por citas breves en revistas impresas, sin la autorización previa por escrito de la editorial.
A menos que se indique lo contrario, todos los textos bíblicos han sido tomados de la Santa Biblia, Versión Reina-Valera 1960 © 1960 por Sociedades Bíblicas en América Latina, © renovado 1988 por Sociedades Bíblicas Unidas. Usados con permiso. Reina-Valera 1960® es una marca registrada de la American Bible Society, y puede ser usada solamente bajo licencia.
Citas bíblicas marcadas “NVI” son de la Nueva Versión Internacional® NVI® © 1999 por la Sociedad Bíblica Internacional. Usada con permiso.
Traducción: Belmonte Traductores
ISBN: 978-1-60255-522-8
Impreso en Estados Unidos de América
11 12 13 14 15 WOR 9 8 7 6 5 4 3 2 1
PARA KENNY Y SHARON WILSON
PUEDE QUE HAYA UNA PAREJA MÁS EXCELENTE EN ESTA
TIERRA, PERO AÚN NO LA HEMOS CONOCIDO.
POR SU AMISTAD, FE Y
DEMASIADO POCAS HAMBURGUESAS,
DENALYN Y YO LES DECIMOS: GRACIAS.
LES DEDICAMOS ESTE LIBRO CON ALEGRÍA A USTEDES:
DOS PERSONAS QUE, DEBIDO A QUE YA LO VIVEN,
NO NECESITAN LEERLO.
ÍNDICE
PARTE PRIMERA
MEDITAR EN DIOS
PARTE SEGUNDA
ANUNCIAR A DIOS
Un día de verano a finales de los años noventa, me encontré con un amigo en el vestíbulo de un hotel. La última vez que habíamos pasado tiempo juntos había sido un año antes. Él tenía un rato libre y yo un estómago vacío. Compramos, pues, unos bocadillos, buscamos una mesa libre y nos sentamos. —¿Qué has aprendido desde el año pasado?—. Mi pregunta estaba “libre de expectativas”, pero su respuesta me proporcionó algo más que un pedazo de bocadillo para masticar.
—¿Qué he aprendido en este último año?—reflexionó él. —Esto es lo que he aprendido: No se trata de mí. No se trata del ahora.
Esa frase provocó la reflexión suficiente como para convertirse en una serie de mensajes y, finalmente, en este libro. Para mí, pues, es correcto que haga una pausa y salude a Sealy Yates. Gracias por compartir la frase y, lo que es más importante, gracias por ser ejemplo de ella.
Sealy no es la única persona que ha hecho posible esta obra. Estas son algunas otras:
Liz Heaney y Karen Hill — Ustedes, con mucha destreza y delicadeza, clarifican y vuelven a dar forma. Gracias a ustedes, este libro y también su autor están en mejor forma.
Steve y Cerril Green — Gracias por supervisar mi vida y ser nuestros amigos. Su compañerismo significa para mí mucho más de lo que soy capaz de expresar.
El equipo de Integrity y Grupo Nelson —Felicidades por ellanzamiento. Me siento honrado de estar a bordo.
Mi familia en Peak of the Week — Me permitieron usar este material como conejillo de Indias con ustedes. Cuán amables fueron al permanecer despiertos.
Carol Bartley — Nadie lo hace mejor. Tu predilección por la gramática nos deja a todos asombrados.
Dwight Edwards — Revolutionary Within conectó todos los puntos para mí.
John Piper — Leer The Supremacy of God in Preaching fue como ver un mapa del sistema solar por primera vez. Gracias por recordarme cuál es mi lugar.
Dean Merrill — Gracias por cuadrar y ajustar los hechos con tanta gentileza.
Rick Atchley — Gracias por los estupendos mensajes, por ser un gran amigo.
Charles Prince — Gracias por desenredar los nudos teológicos y compartir toda una vida de conocimiento.
Jenna, Andrea y Sara — mis hijas, mis tesoros.
Denalyn, mi esposa — Viena tuvo a Mozart, y yo te tengo a ti. Cuánta música haces entrar en mi vida.
Y sobre todo a ti, Autor de la vida. Qué Dios tan grande eres. Todo se trata de ti. Punto.
Por tanto, nosotros todos...
reflejamos como en un espejo la gloria del Señor.
2 Corintios 3:18 NVI
Los equipos del campeonato de la NBA tienen algo en común: juegan con un objetivo en mente. Cada jugador aporta sus propios talentos y esfuerzos para que pueda alcanzarse el mayor objetivo: ganar. Pero los jugadores que buscan su propia gloria a costa del sacrificio de la gloria del equipo, alejan al equipo de poder lograr el éxito. Así ocurre con la vida. El objetivo no es nuestra propia gloria; de hecho, intentar hacer que la vida “se trate solo de nosotros” empuja la felicidad más lejos de nuestro alcance.
Nuestra sociedad no está preparada o predispuesta para pensar de esa manera. Ahí fuera hay un mundo “centrado en el yo”, que destruye mucho de lo que debería ser bueno. Los matrimonios se destruyen porque una o ambas partes están centradas en su propia felicidad. Los hombres y las mujeres exitosos son arruinados por su propio éxito, creyendo que no necesitan la aportación de nadie más. Y para algunos, los problemas de la vida se ven magnificados porque creen que la vida se trata de ellos.
La Biblia está llena de hombres y mujeres que lucharon contra el pensamiento “centrado en el yo”, así que nuestra generación no está sola. Si aprendiésemos de ellos, podríamos vivir en libertad; seríamos capaces de disfrutar de nuestros éxitos sin llevarnos el mérito, como el rey David. Podríamos llevar bien los problemas confiando en Dios, como Job. Al dejar a un lado nuestras propias agendas, horarios y planes —como Moisés hizo finalmente—, descubriríamos que los planes de Dios son increíbles. Al final, un estilo de vida “centrado en Dios” ¡nos liberaría para vivir la vida al máximo!
Mi amigo Max Lucado tiene años de experiencia en seguir a Dios, y esa es la razón de que yo me sienta tan feliz de recomendar este libro. Si usted quiere una gran comida, le enviaré a un gran chef de cocina; pero si quiere aprender acerca de los caminos de Dios, le enviaré a alguien que haya caminado con Él durante mucho tiempo.
Max es ese hombre; el Señor lo ha preparado para este mismo propósito. Le animo a que lea con un corazón abierto a medida que Max comparte el gozo de una vida centrada en Dios.
Quiera Dios liberarnos a todos nosotros de vivir una vida“ centrada en el yo”. ¡Toda la gloria es de Él!
David Robinson
Ex jugador de la NBA
CAPÍTULO UNO
MATAR EL EGOÍSMO
DE LA VIDA
Hay que culpar a Copérnico del topetazo.
Hasta que llegó Copérnico en el año 1543, nosotros —los terrícolas— disfrutábamos del centro de la escena. Los padres podían poner su brazo sobre los hombros de sus hijos, señalar hacia el cielo nocturno y proclamar: “El universo gira alrededor de nosotros”.
Ah, el eje de la rueda planetaria, el ombligo del cuerpo celeste, el 1600 de la Avenida Pennsylvania del cosmos. El hallazgo de Ptolomeo en el siglo II nos convenció. Clava un alfiler en el centro del mapa estelar y habrás hallado la tierra. Justo en el centro mismo.
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