El 4 de noviembre del 2008, los Estados Unidos abren una página importante e inédita en su historia: Barack Obama (nacido en 1961) es elegido presidente de los Estados Unidos, convirtiéndose así en el primer afroamericano en acceder a la suprema investidura. Se ha recorrido un largo camino, desde la época en la que blancos y negros estaban separados en los autobuses, y en la que el Ku Klux Klan militaba por la supremacía de la «nación blanca». Esta victoria, que nace del combate llevado a cabo desde principios del siglo XX para obtener derechos civiles e igualdad racial, se la debemos principalmente a Martin Luther King.
Pastor en una iglesia en Montgomery (Alabama), Martin Luther King se sitúa a la cabeza de un movimiento que quiere luchar contra todas las formas de segregación racial practicadas en los Estados Unidos desde finales del siglo XIX. Es un orador talentoso que logra reunir a las masas alrededor de un discurso que preconiza la lucha contra las injusticias de manera pacifista. Filósofo de la no violencia, desempeña un papel esencial en la toma de conciencia del problema racial en los Estados Unidos y en la emancipación de los afroamericanos. Está presente en todos los frentes, y recibe el Premio Nobel de la Paz en 1964 por su lucha a favor de los discriminados. A pesar de sus numerosas victorias, sus fracasos muestran que todavía queda mucho camino que recorrer en materia de igualdad.
Como toda figura emblemática, Martin Luther King tiene enemigos. Aunque su muerte prematura en 1968 conmueve a la opinión internacional y provoca disturbios en muchas ciudades americanas, también supone el nacimiento de un mito en torno a su figura, que le convierte en uno de los personajes más emblemáticos de la historia del siglo XX.
Biografía
Retrato de Martin Luther King por Betsy Graves Reyneau.
Una familia de pastores
Martin Luther King, cuyo verdadero nombre es Michael Luther King Junior, nace el 15 de enero de 1929 en Atlanta (Georgia) y es el menor de tres hermanos de una familia perteneciente a la clase media acomodada. Su padre, Martin Luther King Senior (1899-1984), oficia desde 1932 como pastor en la iglesia bautista Ebenezer (Atlanta), donde su madre, Alberta Williams (1904-1974) es organista. La familia King, que vive en un barrio negro acomodado, le ofrece a sus hijos, además de un buen entorno cultural, una educación sólida basada en la moral evangélica.
Tras saltarse dos años de instituto, Martin Luther King entra con 15 años en la Morehouse College (Atlanta), una universidad reservada a jóvenes negros, y obtiene en 1948 el Bachelor of Arts and Sociology . Aunque al principio no le atrae demasiado la religión, acaba optando por una carrera religiosa —una decisión que desataría la risa entre sus amigos más próximos, que no se creían la noticia. Pero la vocación pastoral existe en la familia de los King. Así, Martin comienza a estudiar teología en el Crozer Theological Seminary (Pensilvania), licenciándose en 1951.
Los estudios habrían transformado al joven King en un estudiante asiduo y trabajador que quería igualar o incluso superar a sus condiscípulos blancos. Su pensamiento se ve influido por diversas lecturas, desde Gandhi (predicador nacional y religioso de la India, 1869-1948) hasta teólogos estadounidenses protestantes, como Reinhold Niebhur (1892-1971) o Walter Rauschenbusch (1861-1918). Del primero se queda con la doctrina de la no violencia: según Gandhi, el pacifismo es una lucha del amor contra el mal, y es mejor sufrir la violencia del otro que infligírsela. Los otros dos pensadores le llevan a reflexionar sobre el papel de la Iglesia en el establecimiento de la justicia social y a llegar a la conclusión de que es necesario aplicar los principios cristianos a los problemas sociales. Entonces, King decide estudiar un doctorado de teología en la universidad de Boston y, en 1955, presenta una tesis sobre la relación del hombre con Dios. Entretanto, se casa en 1953 con la pedagoga y cantante Coretta Scott (1927-2006) y tienen cuatro hijos: Yolanda (1955-2007), Martin Luther King III (nacido en 1957), Dexter Scott (nacido en 1961) y Bernice (nacida en 1963).
Su acción por la lucha no violenta
Aunque sus orígenes burgueses le libraran de la pobreza, Martin Luther King sabe qué es la discriminación y no puede dejar de interesarse por la suerte de los negros en una época en la que la segregación racial tiene fuerza de ley en los estados del sur de los Estados Unidos.
Se convierte en pastor en 1954 y trabaja en una parroquia en Montgomery. Lidera un boicot de autobuses generalizado en la ciudad durante más de un año (1955-1956), iniciado tras la detención de Rosa Parks (1913-2005), a la que arrestaron por negarse a ceder su asiento a un pasajero blanco. La decisión de los tribunales federales de declarar ilegal la segregación en los transportes es la primera victoria de una larga lucha.
Al año siguiente, el pastor funda una asociación cristiana encargada de coordinar las acciones del clero del sur y que milita por la igualdad racial: la Conferencia Sur de Liderazgo Cristiano. Considerado como el portavoz de la comunidad negra, King es cada vez más popular y aparece en todos los frentes, desde el movimiento de estudiantes en Albany hasta las manifestaciones de Birmingham, sin olvidarnos de sus conferencias en numerosos países. Su objetivo es enseñarle a todos la segregación racial existente en numerosos estados y luchar pacíficamente para acabar con ella. Pronunciará su discurso más famoso ante una multitud de 250 000 personas en Washington, en agosto de 1963. El « I have a dream » («Tengo un sueño») se convierte en un verdadero himno a la solidaridad entre todas las comunidades, independientemente de su color de piel.
Martin Luther King durante una manifestación en agosto de 1963.
El año siguiente King alcanza la cima de su gloria: no solo el presidente estadounidense en funciones, Lyndon Johnson (1908-1973), aprueba la Civil Rights Act , una ley que condena la discriminación por raza, color, religión, sexo o nacionalidad, sino que King recibe ese mismo año el Premio Nobel de la Paz por su acción no violenta a favor de los derechos civiles.
Pero todavía queda mucho trabajo por hacer en materia de igualdad racial, tanto que el discurso pacifista de King se ve poco a poco superado por ideas más radicales y violentas que crecen en las comunidades afroamericanas de los estados del norte, más pobres. Mientras estallan disturbios en varios guetos, que hacen que el movimiento por los derechos civiles pierda el apoyo de los liberales blancos, su postura sobre la guerra de Vietnam (1954-1975), poco favorable, le aísla todavía más. De paso por Memphis (Tennessee) para apoyar a los basureros negros en huelga, Martin Luther King es asesinado el 4 de abril de 1968 en el balcón de su hotel por un militante segregacionista, James Earl Ray (1928-1998). Esta muerte prematura participa en la creación de un mito en torno a la figura de Martin Luther King, que se convierte en el símbolo de una lucha que nunca habrá caído en la violencia.