• Quejarse

Murray N. Rothbard - Historia del pensamiento económico, vol. I

Aquí puedes leer online Murray N. Rothbard - Historia del pensamiento económico, vol. I texto completo del libro (historia completa) en español de forma gratuita. Descargue pdf y epub, obtenga significado, portada y reseñas sobre este libro electrónico. Género: Historia. Descripción de la obra, (prefacio), así como las revisiones están disponibles. La mejor biblioteca de literatura LitFox.es creado para los amantes de la buena lectura y ofrece una amplia selección de géneros:

Novela romántica Ciencia ficción Aventura Detective Ciencia Historia Hogar y familia Prosa Arte Política Ordenador No ficción Religión Negocios Niños

Elija una categoría favorita y encuentre realmente lee libros que valgan la pena. Disfrute de la inmersión en el mundo de la imaginación, sienta las emociones de los personajes o aprenda algo nuevo para usted, haga un descubrimiento fascinante.

Murray N. Rothbard Historia del pensamiento económico, vol. I

Historia del pensamiento económico, vol. I: resumen, descripción y anotación

Ofrecemos leer una anotación, descripción, resumen o prefacio (depende de lo que el autor del libro "Historia del pensamiento económico, vol. I" escribió él mismo). Si no ha encontrado la información necesaria sobre el libro — escribe en los comentarios, intentaremos encontrarlo.

Esta obra ofrece una historia general del pensamiento económico desde una posición «austriaca», esto es, en la perspectiva de alguien que se adhiere a la Escuela Austriaca de Economía. Sigue, pues, el camino iniciado por Schumpeter en su Historia del análisis económico, si bien enriqueciéndolo considerablemente. Destaca el papel de algunas figuras consideradas «menores», deshace muchas ideas convencionales e insiste sobre la importancia de las filosofías religiosas y sociales junto a las ideas estrictamente «económicas». Rastrea a lo largo de la historia ideas que posteriormente constituirán el núcleo de la Escuela Austriaca, como la concepción subjetiva del valor y el protagonismo del empresario en el proceso económico.

En este primer volumen analiza el pensamiento económico desde sus comienzos en el mundo griego «hasta Adam Smith», destacando particularmente la aportación de la tardía Escolástica española (la famosa Escuela de Salamanca) como anticipación de la teoría subjetiva del valor, así como la obra de autores como Turgot y Cantillón, verdaderos fundadores de la ciencia económica, según el autor. Sobre Adam Smith, en cambio, manifiesta una opinión bastante negativa, como responsable de un fatal desvío en la línea de evolución de la teoría económica por su teoría «pre-marxiana» del valor-trabajo. Se trata de un trabajo de gran erudición, escrito con brillantez, claridad y sentido del humor.

Murray N. Rothbard: otros libros del autor


¿Quién escribió Historia del pensamiento económico, vol. I? Averigüe el apellido, el nombre del autor del libro y una lista de todas las obras del autor por series.

Historia del pensamiento económico, vol. I — leer online gratis el libro completo

A continuación se muestra el texto del libro, dividido por páginas. Sistema guardar el lugar de la última página leída, le permite leer cómodamente el libro" Historia del pensamiento económico, vol. I " online de forma gratuita, sin tener que buscar de nuevo cada vez donde lo dejaste. Poner un marcador, y puede ir a la página donde terminó de leer en cualquier momento.

Luz

Tamaño de fuente:

Restablecer

Intervalo:

Marcador:

Hacer

MURRAY NEWTON ROTHBARD El Bronx EE UU 2 de marzo de 1926 - Nueva York EE - photo 1

MURRAY NEWTON ROTHBARD (El Bronx, EE. UU., 2 de marzo de 1926 - Nueva York, EE. UU., 7 de enero de 1995) fue un economista, historiador y teórico político estadounidense perteneciente a la escuela austriaca de economía, que contribuyó a definir el libertarismo moderno y popularizó una forma de anarquismo de propiedad privada y libre mercado al que denominó anarcocapitalismo. A partir de la tesis austríaca sobre la acción humana favorable al capitalismo y en rechazo a la planificación central o estatal, junto al iusnaturalismo jurídico respecto a la validez de los derechos individuales, y teniendo de precedente la idea de anarquía de los anarcoindividualistas del siglo XIX, Rothbard llega a sus propias conclusiones formulando la teoría política del anarcocapitalismo.

Sostenía que aquellos servicios útiles que presta el Gobierno, que están monopolizados por este, podrían ser suministrados en forma mucho más eficiente y moral por la iniciativa privada. Según Rothbard, las actuales funciones del Estado se dividen en dos: aquellas que es preciso eliminar y aquellas que es preciso privatizar. Las privatizaciones propuestas por Rothbard se basan en el principio de apropiación original y en un derecho natural fundamentado en el principio de no agresión.

«Todos los filósofos están casi de acuerdo en considerar que el fundamento de la naturaleza humana es la libertad», afirma Rothbard, pero así mismo dice que solo los libertarios (en especial los anarcocapitalistas) sacan de ello conclusiones coherentes. «La libertad es el derecho natural, para todo individuo, de disponer de sí mismo y de lo que ha adquirido ya sea por medio de la transformación, intercambio o la donación. La libertad y el derecho a la propiedad son, pues, indisociables. Todo atentado a la propiedad es un atentado a la libertad». Según Rothbard, las sociedades que separan la libertad y el derecho a la propiedad privan al hombre de las condiciones para ejercer realmente sus derechos.

A mis mentores,
Ludwig von Mises
y
Joseph Dorfman

Título original: An Austrian Perspective on the History of Economic Thought. Vol. I: Economic Thought Before Adam Smith

Murray N. Rothbard, 1995

Traducción: Federico Basáñez & Ramón Imaz

Editor digital: Titivillus

ePub base r2.1

INTRODUCCIÓN Como declara el subtítulo esta obra elabora una historia general - photo 2
INTRODUCCIÓN

Como declara el subtítulo, esta obra elabora una historia general del pensamiento económico desde una posición francamente «austriaca», esto es, desde la perspectiva de alguien que se adhiere a la Escuela Austriaca de Economía. De hecho, es la única obra de estas características escrita por un economista «austriaco» moderno, siendo así que en las últimas décadas estos economistas apenas si han publicado sobre la historia del pensamiento económico más que unas pocas monografías muy especializadas.

Pero el talante austriaco de esta obra no es su única singularidad, ni muchísimo menos. Cuando el autor comenzó a estudiar economía en los años cuarenta, un paradigma —hoy aún en boga, si bien no tanto como entonces— dominaba por completo el estudio de la historia del pensamiento; un paradigma según el cual la esencia de la historia del pensamiento económico la componen unas pocas figuras prominentes, con Adam Smith —fundador casi sobrehumano— al frente de todas ellas. Ahora bien, si Adam Smith fue el creador tanto del análisis económico como del libre cambio, el fundador de la tradición de la economía de mercado en economía política, sería miserable y muy ruin cuestionar seriamente cualquier aspecto del monumental logro que se le atribuye. Cualquier crítica seria de Smith como economista o como valedor del libre cambio no podría sino parecer anacrónica: algo así como si se mirara con displicencia al fundador y pionero desde la perspectiva que permite el superior conocimiento actual, como si descendientes canijos y debiluchos vapulearan injustamente a aquellos gigantes sobre cuyos hombros se han levantado.

Si Adam Smith creó la economía a semejanza del modo en que surgió Atenea, nacida de la frente de Zeus ya madura y bien armada, entonces los predecesores de Smith debieron ser poco menos que seres insignificantes e irrelevantes. Y tan raquítica estima de hecho mereció, en esos retratos clásicos, quien tuvo la mala suerte de preceder a Smith. A los tales se agrupaba por lo general en dos categorías, despachándoseles sin el más mínimo miramiento. Inmediatamente anteriores a Adam Smith, los mercantilistas, a quienes éste criticó con dureza, bobos empeñados en que la gente acumulara dinero para jamás gastarlo, o en que la balanza comercial se equilibrara país con país. Los escolásticos eran desechados con mayor rudeza aún, si ésta cupiera, ignorantes medievales que insistían en que el «justo precio» debía cubrir los costes de producción e incluir además un beneficio razonable.

Las obras clásicas de historia del pensamiento económico escritas a lo largo de las décadas de 1930 y 1940 procedían después a exponer —y en muchos casos, celebrar— algunas figuras destacadas posteriores a Smith. Ricardo sistematizó a Smith, y dominó el panorama económico hasta la década de 1870; después, los «marginalistas», o sea, Jevons, Menger y Walras, ofrecieron una revisión marginalista de la «economía clásica» de Smith-Ricardo, insistiendo en la importancia de la unidad marginal en lugar de en los bienes tomados en su conjunto. Así hasta Alfred Marshall, quien sagazmente creó la economía neoclásica moderna al integrar la teoría de costes ricardiana con el énfasis, supuestamente unilateral, de austriacos y jevonianos en la demanda y la utilidad. No cabía preterir a Karl Marx, claro, y por eso se le dedicaba el capítulo que merecía como ricardiano aberrante. El historiador del pensamiento podía componer así su historia con cuatro o cinco figuras notables, relatando la contribución de cada una de ellas —con la excepción de Marx— al progreso sin fisuras de la ciencia económica. Una historia, por otra parte, siempre hacia adelante y hacia arriba, hacia un mayor esclarecimiento de la verdad.

En los años que siguieron a la II Guerra Mundial se añadió, como no podía ser menos, la figura de Keynes al panteón, lo que proporcionó un nuevo capítulo culminante en el progreso y desarrollo de la ciencia. Keynes, amado discípulo del gran Marshall, advirtió que el viejo caballero había dejado de lado lo que luego se llamaría «macroeconomía», con ese énfasis tan suyo por la micro en exclusiva. Así que Keynes añadió la macro, concentrándose en el estudio y explicación del desempleo, un fenómeno que cuantos le precedieron habían pasado inexplicablemente por alto, excluyéndolo del cuadro de la economía, o habían barrido sin más bajo la alfombra, «presuponiendo el pleno empleo».

El paradigma dominante ha dominado efectivamente desde entonces, si bien es cierto que el asunto últimamente no está tan claro, ya que este género de historia «siempre ascendente» de grandes figuras precisa ocasionalmente de nuevos capítulos finales. La Teoría General de Keynes, publicada en 1936, tiene ya casi sesenta años. Seguro que debe existir algún otro gran hombre que añadir a la lista, pero ¿quién? Por un tiempo se pensó que sería Schumpeter, con su moderna y en apariencia realista insistencia en la «innovación»; pero esta tentativa resultó fallida, quizás al advertirse que la obra fundamental (o «visión», como prescientemente la llamó él mismo) de Schumpeter se escribió más de dos décadas antes que la Teoría General. Los años que siguieron a la década de los cincuenta fueron confusos, y es difícil forzar el retorno del una vez olvidado Walras al lecho procrusteano del progreso continuo.

Página siguiente
Luz

Tamaño de fuente:

Restablecer

Intervalo:

Marcador:

Hacer

Libros similares «Historia del pensamiento económico, vol. I»

Mira libros similares a Historia del pensamiento económico, vol. I. Hemos seleccionado literatura similar en nombre y significado con la esperanza de proporcionar lectores con más opciones para encontrar obras nuevas, interesantes y aún no leídas.


Reseñas sobre «Historia del pensamiento económico, vol. I»

Discusión, reseñas del libro Historia del pensamiento económico, vol. I y solo las opiniones de los lectores. Deja tus comentarios, escribe lo que piensas sobre la obra, su significado o los personajes principales. Especifica exactamente lo que te gustó y lo que no te gustó, y por qué crees que sí.